El Consejo de Gobierno aprobó ayer un gasto de 1,6 millones de euros —a ejecutar en dos anualidades, 650.824 euros este año y 976.236 el próximo— para sufragar la compra de 300 cabinas de duchas inteligentes, un producto que fomenta la autonomía de las personas con discapacidad, reduce la ayuda de terceras personas y que es capaz de lavar, aclarar, hidratar y secar a los usuarios en un entorno estable, seguro, accesible y fácil de manejar.
La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades apuesta por estimular esta autonomía de las personas con movilidad reducida con productos de este tipo en el marco de programas consolidados como ‘A gusto en casa’ o ‘INTecum’. Precisamente, estas cabinas se prestarán a personas usuarias de los programas de atención domiciliaria como los antes mencionados. Se entregan como préstamo para evitar que las personas que los necesitan tengan que desembolsar cantidades que oscilan entre los 5.000 y los 6.000 euros, como es el caso de las cabinas de ducha.
Este sistema se puede instalar en el cuarto de baño prácticamente sin la necesidad de acometer obras de fontanería o eléctricas. El lavado corporal se podrá hacer sentado en un asiento extraíble incorporado a la propia ducha, lo que también permite realizar la acción de pie con el apoyo de unos asideros que también van integrados.
Se trata de un sistema completo, que permite llevar a cabo las acciones de lavado, aclarado, hidratación y secado de todo el cuerpo, unas operaciones que podrán ser activadas por el propio usuario, ya que los comandos son simples, de gran tamaño y con las mínimas funciones posibles.
Estos dispositivos son adaptables a cualquier altura y completamente accesibles, así como favorecen la estabilidad dentro de la ducha, además de ser energéticamente sostenibles y estar fabricados con materiales de alta durabilidad.
Llegada de inmigrantes
El consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, aseguró hoy que la postura del Ejecutivo autonómico en temas de inmigración es la expresada el miércoles por la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, ante la llegada de un contingente de menores inmigrantes no acompañados al municipio leonés de Villarrodrigo de las Regueras. Isabel Blanco reiteró que Castilla y León es “tierra de acogida y solidaria y va a continuar siéndolo, lo cual ha venido demostrando ante las graves crisis migratorias de los últimos años, tales como la de Ucrania, Afganistán y la constante llegada de migrantes a Canarias”. Pese a ello, exigió al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones una política migratoria coordinada e informada, después de que no haya llegado a la Junta una comunicación oficial desde el Gobierno central, sino mediante publicaciones en prensa. En esta línea, Carriedo animó al Ejecutivo central a cambiar su “actitud” y contar con las comunidades autónomas y las ONGs para contar con el mejor dispositivo posible.
Además, pidió al delegado del Gobierno de Castilla y León, Nicanor Sen, que pida disculpas después de que haber apuntado que se había facilitado la información a la gerente regional de Salud. “No es la primera vez. La vez anterior -en referencia a la llegada de 150 inmigrantes al Balneario de Las Salinas en Medina del Campo (Valladolid)- era otra persona al frente de la Delegación y pidió disculpas, y ahora también las esperamos del nuevo delegado, en relación a este asunto”, declaró.
