La Plataforma en Defensa de la Estación de Autobuses quiere en primer lugar felicitar al nuevo alcalde de la ciudad, D. José Mazarías, y desearle todo tipo de aciertos en las actuaciones que va a llevar adelante con su equipo y el resto del concejo, aciertos de los que los segovianos vamos a ser los indudables beneficiarios.
Como no puede ser de otra manera, los miembros de esta Plataforma queremos centrar nuestra reflexión en lo que concierne a esta infraestructura. Afortunadamente, lejos queda ya el informe sobre las repercusiones del tren de alta velocidad promovido en 2003 por la Cámara de Comercio e Industria y apoyado por las fuerzas vivas de la ciudad, en el que se concluía que habría un “Espectacular desarrollo de las zonas sur y este del término municipal de Segovia, donde se ubicarán las nuevas estaciones del TAV y autobuses”, cambio que, como hemos ido poniendo de manifiesto en todos estos años, habría supuesto un auténtico desatino a todos los niveles.
Por suerte no ha sido así y, después de lustros de trabajo, las cosas se han ido reconduciendo por otros derroteros hasta que precisamente en estos momentos todos nuestros representantes políticos están de acuerdo en que la nueva Estación de Autobuses se haga en la ubicación actual. Además -y como todos sabemos- la Junta de Castilla y León tiene ya presupuestados los fondos para esta infraestructura con una fecha límite para su ejecución, por lo que no queda sino empezar a dar pasos en ese sentido, teniendo muy presente que de ninguna manera podemos dormirnos en los laureles y poner en riesgo esa dotación por falta de impulso.
Aquí es donde esta Plataforma quiere incidir, ya que entre las propuestas que ha hecho el Alcalde de cara a su actuación en estos primeros meses de su mandato no ha hablado expresamente de la Estación, cuando es uno de los asuntos que ha tenido más recorrido en los últimos años, y probablemente uno de los proyectos urbanísticos de mayor envergadura de los que va a tener que abordar en estos años venideros. Por tanto, lo primero es poner en marcha los necesarios trámites administrativos y convocar un concurso de proyectos para poder decidir el más interesante, que deberá incluir necesariamente el total aprovechamiento de los sótanos para dar mejores servicios a los usuarios. Creemos que habrá suficiente con los 9.347 m2 de propiedad municipal, pero si el proyecto requiere aumentar esa cantidad sería el momento de plantearlo, ya que la ley lo permite.
También queremos hacer una sugerencia para esta infraestructura que va a constituir nuestra tarjeta de visita de cara a los visitantes y el punto diario de encuentro para muchos segovianos, y es que no es imprescindible que la nueva estación sea fea. Por toda España -y fuera de ella- existen estaciones de autobuses o de ferrocarril que son verdaderas joyas, y Segovia debería aspirar a encontrarse entre una de ellas. Tenemos muchos artistas locales que pueden aportar su imaginación y trabajo para conseguirlo, y no se debe desaprovechar esta ocasión. En esa línea, la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte debería arrimar el hombro para conseguir que la Estación de Autobuses de Segovia esté a la altura de una ciudad Patrimonio de la Humanidad.
Pocas veces un alcalde se encontrará con un asunto tan trillado, así que ¡ánimo y manos a la obra!
