El Ayuntamiento de Segovia y el Ministerio de Cultura mantienen firmes esperanzas de que las contribuciones económicas de los ciudadanos particulares, a través de micromecenazgo o crowfounding, contribuyan a mejorar la protección del Acueducto.
Así se puso de manifiesto ayer en la inauguración de las III Jornadas del Acueducto de Segovia, que se desarrollan durante esta semana, y que incluyen un amplio programa de actividades que giran en torno al monumento romano que “distingue y nos identifica”, en palabras de la alcaldesa de la ciudad, Clara Luquero; y del delegado de la Junta, Javier López Escobar. Ambos participaron en la inauguración, junto a la concejala de Patrimonio Histórico, Turismo y Urbanismo, Claudia de Santos.
El objetivo de las jornadas es “profundizar en el conocimiento del monumento, y aumentar la conciencia ciudadana de la población” sobre la importancia del principal monumento de Segovia.
Desde la Concejalía de Patrimonio Histórico se expresó su confianza en que la campaña no sólo ayude a financiar las labores de protección, tanto activa como pasiva del monumento; sino también a que se tome una mayor concienciación de la importancia de este monumento de más de 2.000 años de antigüedad.
En la misma línea se pronunció Borja Álvarez Rubio, subdirector general de Promoción de Industrias Culturales y Mecenazgo del Ministerio de Cultura, quien presentó el proyecto ‘Restituerunt’, al que se sumaría esta campaña de micromecenazgo, con aportaciones de hasta 150 euros, y que tendría el atractivo del beneficio fiscal con una deducción del 70 por ciento. En su exposición dijo que este modelo se ha implantado con éxito en otros monumentos como el Museo del Prado, y en países como Italia. La concejala Claudia de Santos puso otros ejemplos cercanos como la Puerta de la Gloria, en Santiago de Compostela.
La duda se encuentra ahora en el modo en que se llevaría a cabo esta campaña de economía colaborativa, en la que el Ayuntamiento debe decidir si la plataforma digital de gestión y promoción la desarrollaría directamente el Consistorio, o ser haría de forma externa.
El otro tema central de la jornada inaugural lo protagonizó la ordenanza que desde el Ayuntamiento se prepara para proteger el Acueducto. Fue presentada por Esther Trilla Martínez, arquitecta municipal de la Concejalía de Patrimonio Histórico. Lo más complicado en su redacción ha sido, según De Santos, contemplar los numerosos riesgos existentes, y la posible colisión del texto normativo con otras ordenanzas, así como y la regulación y penalización de las conductas inadecuadas.
Para ello, la alcaldesa volvió a insistir en la conveniencia de mejorar la vigilancia del monumento a través de cámaras de grabación, que se situarían en zonas como la plaza de Día Sanz, y que también servirían para disuadir a los posibles agresores del monumento.
