La Delegación del Gobierno en Castilla y León no prohibirá las manifestaciones del 8 de marzo en la comunidad porque no hay ningún informe sanitario en contra de la Junta de Castilla y León, según ha afirmado el delegado, Javier Izquierdo.
En declaraciones a los periodistas en Burgos, Izquierdo ha recordado que el Gobierno no autoriza las manifestaciones, sino que recibe la comunicación de que se pretenden celebrar, aunque “puede poner limitaciones y podría llegar a prohibirlas si pueden suponer algún riesgo”.
Por esta razón, ante cada convocatoria se pide informe a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y, desde el pasado mes de mayo, a la Consejería de Sanidad de la Junta para que evalúe el riesgo sanitario. Desde entonces solo se ha prohibido una manifestación por un informe desfavorable de la Junta de Castilla y León, ha recordado el Delegado del Gobierno.
En el caso de las convocatorias para el 8 de marzo, no se ha recibido ningún informe de la Junta que desaconseje celebrar las manifestaciones. “Si no hay ninguna razón sanitaria que lo desaconseje no se prohibirán ni estas manifestaciones ni ninguna otra”, ha afirmado Javier Izquierdo.
