EFE / SEGOVIA
Los meses de mayor afectación sanitaria y económica de la pandemia de la Covid-19 se han traducido en un descenso de casi 19 puntos -18,8%- del Producto Interior Bruto (PIB) de Castilla y León durante el segundo trimestre del año, el peor de toda la serie histórica desde que se tienen datos. Según los datos de contabilidad regional correspondientes a los meses de abril, mayo y junio, la Comunidad agrava la recesión ya registrada en el anterior trimestre, en el que se experimentó una caída del 3,2% del PIB, informó este lunes en rueda de prensa el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo.
Por ello, el titular de Economía y Hacienda ha resumido que el primer semestre del año cierra con una caída media de 11 puntos del PIB, algo que, ya de por sí, hace aventurar un «muy mal año» para la economía de la Comunidad, que aún así registra «mejor dato» que el conjunto nacional, aunque peor que la media de Unión Europea. Dada la «gran incertidumbre sanitaria», Fernández Carriedo evitó realizar un pronóstico para los próximos meses, ya que los datos vendrán determinados por la «evolución sanitaria». «No habrá evolución positiva económica sin la sanitaria», pronunció.
Asimismo, el consejero confía en que el tercer trimestre del año arroje mejores datos que este finalizado aunque, en todo caso, «no serán mejores» que en el mismo periodo de 2019, expresó Fernández Carriedo, quien reconoció además que el mes de septiembre también está lleno de «incertidumbre» al coincidir con el fin del periodo estival
CAÍDAS HISTÓRICAS
Como destacó el consejero, varios sectores productivos han registrado en los meses de abril, mayo y junio los mayores descensos en sus series históricas, como los casos de la industria (-22,8%), la construcción (-24,4%), la formación bruta de capital -inversión- (-27,8%) y el sector servicios (-18%). Por el contrario, el sector primario de Castilla y León anotó en el segundo trimestre del año un crecimiento interanual del 7,7%, dado el «incremento de la producción agrícola» y a pesar del descenso de la ganadería.
En cuanto a la industria, mientras que las ramas energéticas descendieron un 2% interanual, las manufactureras acopiaron la mayor parte del descenso del sector, con una caída del 24,4%, especialmente graves en material de transporte, las de metalurgia y las de caucho y plástico. En el sector de la construcción, este se ha visto «especialmente afectado» debido a la «práctica suspensión» de la edificación e ingeniería civil, que han llevado al sector a una caída del 24,4% en términos interanuales.
En servicios, el sector anotó un descenso de 18 puntos interanuales, con un decrecimiento en el componente de mercado y una «desaceleración» en los de no mercado. En términos de demanda, el consumo final descendió un 14,2% en este segundo trimestre, con una caída del 20% del consumo de los hogares, mientras que las administraciones públicas registraron un crecimiento del 3,4% de su consumo, derivado de las necesidades de equipamiento médico. Finalmente, en referido al empleo, este anotó una variación interanual del -11,6%, con un descenso en el empleo de todos los sectores productivos superiores a los registrados en el primer trimestre del año.
