Histórico. Un San Cristóbal hambriento y repleto de talento disputará la Copa de España como uno de los ocho mejores equipos del país del 22 al 24 de marzo en Cartagena. Un hito sin precedentes para la ciudad que tiene en Diego Gacimartín a uno de sus principales artífices desde el banquillo.
P.- Una temporada histórica, con 18 de 18 victorias en liga y el billete para Cartagena en el bolsillo. Inicio de curso soñado, ¿no?
R. – Así es, ni mucho menos nos lo imaginábamos. Nos hemos adaptado muy bien a un grupo de competición que desconocíamos y, por suerte, hemos sido capaces de conjuntar al equipo. Ya no es sólo los resultados, sino la forma de competir y disputar los partidos. Cuando empezamos en agosto la pretemporada no nos marcamos por objetivo ni estar peleando por la liga ni mucho menos plantearnos jugar la Copa, sino ir viendo cómo se iba desarrollando una temporada que era totalmente nueva para nosotros y cómo se iban incorporando los jugadores nuevos a la rutina de trabajo y al modelo de juego. Estamos muy contentos y ojalá podamos seguir a este nivel.
P.- Con los resultados en la mano y las sensaciones tan positivas, ¿Dónde está el techo de este equipo?
R. – Creo que el límite nos lo tenemos que poner nosotros mismos. La idea es mejorar cada día y progresar en cada entrenamiento. Nosotros insistimos mucho en los detalles porque son los que marcan la diferencia. Al final, la categoría de juvenil es un ciclo que suele durar tres o cuatro años, en función de los futbolistas, por lo que este ciclo acabará y nosotros esperamos que alguno de ellos pueda llegar al primer equipo porque eso significaría que están progresando y siguiendo un buen camino.
P.- ¿Cuáles dirías que son las claves de este equipo?
R.- La llave de este grupo diría que es el compromiso. Es una edad un poco complicada por lo estudios y por los entornos, pero este grupo tiene una capacidad de sacrificio que es alabable. No es fácil encontrar un vestuario con un ambiente tan bueno como este y si encima los resultados positivos acompañan todo es más sencillo.
P.- Hablabas de un grupo desconocido en liga. ¿Cómo estás viendo esa adaptación al grupo vasco viniendo del gallego?
R.- Al final en el gallego hay equipos de Segunda B y Segunda División con lo cual los jugadores de juvenil muchos de ellos juegan con esos equipos de mayor categoría por lo que su nivel competitivo aumenta. Ahora, en el vasco, no tenemos referencia en esas categorías. Sí que hay algún equipo en Tercera, nosotros lo tenemos en Segunda B, pero hay muchos incluso que tienen dificultad para sacar equipo por debajo y supone un hándicap. Nosotros nos hemos adaptado muy bien y tenemos que seguir compitiendo de la misma manera.
P.- ¿Cuál ha sido la base sobre la que estáis trabajando y que tan buenos resultados está dando?
R. – En mi primera temporada con respecto a esta perdimos cinco jugadores y este año respecto a la siguiente nos pasará igual porque son ciclos. La base sobre la que estamos trabajando ya empezó el año pasado. Al final, teníamos una base que son los de tercer año que son cinco jugadores y la temporada anterior ya fuimos metiendo cadetes y juveniles de primer año. Es un trabajo a largo plazo, sobre el que llevamos trabajando tiempo y que queremos mantener de cara al futuro.
P.- Siendo un entrenador más que contrastado. ¿Qué dirías que lo hace de especial a este vestuario?
R. – Te diría que el alto compromiso que tienen y que es muy importante. La base sobre la que se sustenta el trabajo es el compromiso, la humildad y las ganas que tenemos de aprender. Son los tres pilares fundamentales y es lo que estoy viendo este año en el vestuario. Además, el ambiente de compañerismo y sacrificio por el de al lado es muy bueno.
P.- Tras tu paso por el Leganés, ¿qué significa para ti esta oportunidad en el San Cristóbal?
R.- Para mí es una satisfacción el poder ver que lo que vamos trabajando en el día a día se aplica a los partidos. Estoy muy agradecido al club porque después de esa etapa en el Leganés estuve el año sin entrenar. Al final, se produjo esta posibilidad de llevar al juvenil, es mi segunda temporada y estoy muy contento tanto con el club como con el trabajo que estamos consiguiendo con los chicos. Ojalá que dure muchos años más.
P.- El billete para la Copa de España es una clasificación histórica. ¿Qué supone tanto para el club como para el pueblo?
R.- El algo que no se ha producido nunca en este nuevo formato ni que ningún equipo de la ciudad había logrado. Lo que queremos es hacerlo lo mejor posible sabiendo de la dificultad que entraña jugar contra equipos de identidad como el Barcelona o El Pozo Murcia. Sabemos que tenemos una oportunidad de intentar demostrar el juego que practicamos y poder reivindicar que en Segovia, pese a que no tenemos equipo en la élite, es una ciudad que sigue respirando fútbol sala por todos lados. Sin duda, es una gran oportunidad de decir que Segovia, a través del San Cristóbal, está ahí, entre los ocho mejores equipos de España.
«Vamos a disfrutar de una competición bonita, pero no queremos descuidar la liga»
P.- ¿Con qué expectativas y cómo afrontáis esa Copa en Cartagena?
R.- Nuestro objetivo número uno es disfrutar de la experiencia. Para nosotros es un momento muy bonito y queremos que el equipo llegue en las mejores condiciones. Vamos a poder comprobar que nivel tenemos respecto al resto e intentaremos ser competitivos. No nos ponemos objetivo a nivel deportivo porque es muy complicado saber que nos encontraremos, pero vamos a intentar hacerlo lo mejor posible.
P.- ¿Entre la ilusión de afrontar una experiencia así y la presión y nervios de hacer un buen papel sobre qué lado se decanta más la balanza?
R.- Tenemos el mismo porcentaje de ilusión y de disfrutar de la competición que por otro lado de hacerlo bien. Vamos a intenta ser fieles a nosotros mismos, jugar a lo que trabajamos porque es el camino para acercarnos a ser competitivos y a plantar cara en ese partido de cuartos contra Las Rozas que no será fácil, ya que aportan muchos jugadores a la selección madrileña que es la actual campeona sub19 por lo que será un rival muy complicado.
P- El sorteo ha deparado que no os encontréis hasta una hipotética final a Barcelona y El Pozo, a priori los dos favoritos para el título. ¿Hay motivos para soñar?
R.- El sueño es ir a disfrutar y el hecho de poder jugar esta competición porque no hay muchos equipos que lo puedan hacer. Vamos con toda la ilusión y ojalá podamos hacer un buen papel.
