Maite Sánchez Barahona anunciaba ayer la noticia inesperada junto a todos sus compañeros del equipo de Gobierno: renuncia a la liberación como concejal del Ayuntamiento de Cuéllar, pero no al cargo, que continuará ejerciendo. Sánchez detalló los motivos por los que renuncia a tal liberación “con todas las consecuencias, en el sentido de que no voy a cobrar nada que venga del Ayuntamiento y no voy a volver a solicitarlo, es una decisión completamente pensada”.
La joven concejal comentó que fue el 24 de septiembre cuando la Dirección General de Recursos Humanos de Educación le otorgó una adjudicación de destino en régimen de sustitución en un instituto de Educación Secundaria y Bachillerato para ejercer como docente. “Ya se sabe lo complicado que esto, cuando salen listas en Educación y teniendo en cuenta cómo han caído las listas de forma brutal con el covid porque se requieren profesores”, explica, aclarando que tuvo que decidir en un solo día. Explicó que lo primero que hizo fue comentarlo con sus compañeros del equipo de Gobierno para reflexionar de manera conjunta. Sánchez cuenta con formación en Historia e Historia del Arte, un currículum y una puntuación “que no quería perder porque si se rechaza esto y más en asignaturas obligatorias, quedas fuera de lista”. Por ello, no quería perder competencias ni puntos y aprovechar “esta oportunidad laboral tan interesante”. Sánchez fue clara y rotunda hablando de que considera la política como una “etapa transitoria, que no solo depende de ti sino de cómo te refuercen y respalden tus vecinos, y entiendo que mi futuro continúa”. Por ello, ha tomado la decisión de aceptar este puesto de trabajo, apoyada al completo por sus compañeros de equipo. La concejal ha querido aprovechar la ocasión para contar que el año pasado, en septiembre, recibió una oferta de docencia de la Universidad de Valladolid; esta la rechazó dadas las circunstancias y su reciente entrada al Gobierno local. “Consideraba que mis equipos no estaban lo suficientemente coordinados y había un proyecto que sacar adelante, no era el mejor momento y lo rechacé”. Sin embargo, ahora ha considerado que el apoyo total y unos equipos perfectamente coordinados tanto en Cultura como en Turismo le han permitido esta posibilidad. “Ambos equipos también me han apoyado, y voy a poder trabajar con ellos por las tardes”, concretó la concejal.
MANTIENE SU CARGO
Maite Sánchez aclaró que solo renuncia a su liberación pero seguirá ocupando el cargo de concejal de Turismo, Cultura y Patrimonio. “No renuncio a mis concejalías, y lo digo porque tengo un compromiso con los vecinos, mucha gente ha apostado por mí y me gusta mirar a la gente a los ojos”; “creo mucho en la política municipal, creo que estoy aquí por algo y considero que tengo que continuar con mi trabajo aunque doble esas funciones”, señaló. Especificó que los vecinos la podrán encontrar en el Ayuntamiento los lunes y los viernes durante casi toda la mañana, todas las tardes. Su jornada de docencia será de 14 horas en el Instituto Delicias, como profesora de Historia. “Lo más importante para mí es adquirir una experiencia y poder competir en un mundo laboral en el que me he formado y al que he dedicado gran parte de mis estudios”.
Por otro lado, la edil quiso recalcar que los vecinos mantengan una total tranquilidad: “el Turismo, la Cultura y el Patrimonio van a continuar en Cuéllar, hemos sido luchadores en momentos como el covid y hemos tirado para adelante”. Sánchez destacó el verano cultural y turístico, cómo los datos no han sido tan negativos como se podía esperar.
El alcalde de la villa, Carlos Fraile, quiso pronunciarse para manifestar su apoyo a Maite: “el respaldo es evidente ante una decisión personal porque la política es transitoria y quien piense lo contrario se equivoca; la política es transitoria, para servir al ciudadano, y Maite se formó para docencia, es hacia donde su futuro va dirigido”, explicó el regidor local ante el resto de ediles.
