El barrio de San Millán celebraba ayer la festividad de su patrón San Roque, unos actos con una gran tradición y seguimiento por parte de los vecinos y vecinas del barrio y cuyos actos litúrgicos son uno de los eventos más esperados.
A las 20.00 horas de este sábado, tenía lugar el Voto a San Roque, que contó con la presencia del alcalde de Segovia, José Mazarías, quien, siguiendo una tradición con más de 400 años de antigüedad, se arrodilló ante la imagen y pidió a San Roque que aceptase la ofrenda del pueblo de Segovia y tuviese por renovada la fe antigua de esta ciudad.
Tras la eucaristía, se celebró la procesión con la imagen del santo por las calles del barrio, donde no faltó el acompañamiento de la dulzaina y el tamboril.
Por la noche y tras una cena popular de huevos con chorizo, amenizada con música de DJ, se llevó a cabo una de las novedades de este año, la tradición de la ‘Quema de la bruja’, que la organización de las fiestas recupera tras más de tres décadas sin celebrarse. “Se trata de un acto similar a la quema del pelele de Santa Águeda, para deshacerse de todo lo malo del año y quedarse solo con los bueno’, según explicaba Cristina, una de las organizadoras de las fiestas.
“Es una ocasión perfecta para vivir nuestras tradiciones, participar en los actos religiosos, disfrutar de la música y la buena comida, y fortalecer la vida de barrio”, comentaban también desde la Cofradía, de San Millán, que se encargan de organizar las fiestas en colaboración con la Asociación de Vecinos del barrio.
