Los enfermos activos con síntomas compatibles con Covid-19 contabilizados por Atención Primaria en la provincia de Segovia ascienden a 1.770 personas, sin embargo, a pesar de la abultada cifra, representa el menor registro que obtenido desde el 22 de marzo.
Si se compara con los casos registrados a inicios del mes anterior, la cifra se ha reducido a casi un tercio de los enfermos localizados el día 1 de mayo, cuando había 4.596, cerca del pico epidemiológico de casos activos que se localizó el día 29 de abril con 4.633 casos.
En cuanto a los datos de Atención Primaria de casos diagnosticados en total, la cifra ascendería a 8.380, por lo que en Segovia se habrían registrado un mínimo de 4.866 contagiados más que los confirmados mediante prueba de detección, que en la actualidad ascienden a 3.514.
El concepto de enfermo activo engloba a los pacientes con todos los diagnósticos compatibles con coronavirus (neumonía por Covid-19 y enfermedad por Covid-19) que siguen manifestando síntomas y que por tanto se entiende que la dolencia permanece vigente aunque no se les haya confirmado el positivo mediante prueba de detección. Las cifras, que recaba Atención Primaria, no abarcan a los pacientes que han dejado de presentar síntomas por haberse recuperado de la enfermedad.
Con ayuda del gráfico de casos activos (debajo de estas líneas), se puede establecer su evolución en Segovia, con cinco fases diferenciadas.
La primera empieza con el propio ciclo epidemiológico y supone un rápido ascenso de los casos, con crecidas exponenciales que llegan hasta el 2 de abril, fecha en la que se contabilizaban 3.761 que padecían el coronavirus en ese momento. La segunda es explicada con un concepto que se denominó ‘aplanamiento de la curva’. En esta etapa se puede ver como los casos activos siguieron aumentando, pero no a la velocidad de la anterior etapa, hasta alcanzar su pico máximo de casos con 4.633 documentados por Atención Primaria. En su última etapa, se puede observar cómo se puede intuir una leve reducción, que es el preludio de la siguiente fase.
La tercera fase viene marcada por las grandes caídas de los casos. Las personas que enfermaron a mediados de marzo comenzaban a sanar y los contagios se habían reducido tras decretarse el confinamiento obligatorio. De esta forma, se observa una rápida bajada que se sostiene por quince días y que hace bajar los casos a casi la mitad, con 2.448 el 17 de mayo. La cuarta engloba un periodo de impasse que dura cerca de diez días, las cifras de enfermos activos bajan en inicio y después suben sin contabilizar grandes variaciones, hasta el punto de que el 27 de mayo se contabilizan casi los mismos casos que los registrados el 17 de ese mismo mes.
Por último, cabe destacar la quinta fase, en la cual se encuentra Segovia en estos momentos. Esta etapa viene marcada por grandes caídas, pero más pequeñas que las obtenidas en el tercer periodo. Finales de mayo consigue reiniciar las bajadas que a medida que avanza junio se agravan hasta el 5 de junio, en el que se contabilizan 1.862 enfermos activos. Desde ese momento las reducciones se aminoran hasta llegar hasta al último día que se han ofrecido datos, el 11 de junio, en el que se han contabilizado 1770 tras una pequeña subida respecto al día anterior, que marcó 1.757.
Estas cifras reafirman algo que los Servicios Sanitarios llevan aclarando desde hace semanas, los contagios comunitarios han caído hasta ser minoritarios y la pandemia ha retrocedido, pero el virus sigue activo en las calles de Segovia.
El impacto de la enfermedad ha sido especialmente doloroso para Segovia, provincia que cuenta con la mayor tasa de enfermedad por 100.000 habitantes de toda Castilla y León, con 5.736. La única que sigue de cerca a Segovia, Soria baja sus registros hasta los 5.072, mientras que la tercera Ávila refleja otra realidad muy distinta con 3.870. Las demás están más lejos.
Además, Segovia tuvo que hacer frente a esta situación con una alarmante falta de recursos en su sistema sanitario, lo cual sin duda ha agravado la de por sí pésima situación vivida por profesionales sanitarios y enfermos.
Cabe señalar las diferencias que registra las diferencias de la gráfica de enfermos activos de la provincia con el de Castilla y León. En el autonómico, se puede observar un cambio de tendencia mucho más parabólico, con cambios menos pronunciados que los registrados en Segovia.
Zonas de salud
Otra de las incógnitas que revela los datos de enfermos activos es la incidencia de la enfermedad y su espacio temporal en los territorios segovianos. De esta forma, la ciudad de Segovia con sus tres áreas de salud es donde se registran un mayor número de casos activos, con 736 enfermos activos y un total de personas que en algún momento padecieron la enfermedad de 3.687. Así Segovia I contabiliza 236 (los enfermos totales, incluido los recuperados y las muertes llega a 1.368), Segovia II 203 (1.246) y Segovia III 297 (1.073).
Por detrás, se sitúa la zona básica de Segovia rural con 412 enfermos activos (1.358 en el total), Carbonero el Mayor 134 (640), Nava de la Asunción 107 (394),Cuéllar 83 (484), Cantalejo 80 (354), El Espinar 68 (262) y San Ildefonso 68 (548). Con menores cifras se sitúan Riaza 27 (91), Villacastín 17 (171), Sepúlveda (112), Navafría 12 (157), Sacramenia 6 (64) y Fuentesauco 4 (58).
En la evolución de la semana, todos los territorios han reducido sus casos menos la capital (las tres zonas) y el oeste de la provincia (Nava, Villacastín y El Espinar) que han aumentado sus casos activos a lo largo de la semana.
