El Colectivo Azálvaro ha identificado la comarca de la Campiña Segoviana como un “punto negro” de mortalidad para el Águila Imperial Ibérica. Este año, durante las jornadas de prospección de tendidos eléctricos en la provincia, se hallaron siete cadáveres de esta especie protegida, víctimas de electrocuciones. Este hallazgo, según explicaron desde el colectivo, “subraya la necesidad urgente de tomar medidas para proteger a esta especie en peligro de extinción”.
El responsable de proyectos del Colectivo Azálvaro, José Aguilera, explicó que “están haciendo especial hincapié en detectar los apoyos peligrosos, abarcando muchos de los espacios protegidos de la provincial de Segovia”, no sólo los de empresas de distribución sino también los tendidos eléctricos peligrosos de propiedad particular, “en muchos casos de gran riesgo para la electrocución, como hemos detectando en la comarca de la Campiña Segoviana”.
En la Comarca de la Campiña Segoviana se documentaron cinco casos de mortalidad de esta especie solo en lo que va de año, “evidenciando la grave amenaza que representan estas infraestructuras”. Estas muertes, según el responsable de proyectos, tienen un impacto directo y devastador en las poblaciones de Águila Imperial Ibérica, afectando también la salud de los ecosistemas locales y el equilibrio de las cadenas tróficas.
“La identificación de este nuevo ‘punto negro’ de mortalidad para la especie subraya la necesidad de una acción coordinada y urgente”, por lo que instaron a todos los actores implicados a trabajar juntos “para evitar más pérdidas y asegurar un futuro sostenible para nuestras aves y ecosistemas”, concluyó Aguilera.
