La Sección Décima de la Audiencia de Barcelona ordenó reabrir la investigación por supuestas irregularidades en el trasplante de hígado en 2012 al actual secretario técnico del FC Barcelona y exjugador, Eric Abidal, según informó ayer en un comunicado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). Así, se reabrirán las diligencias del Juzgado de Instrucción 28 de Barcelona por la presunta compra ilegal de un hígado por parte del entonces presidente del FC Barcelona, Sandro Rosell.
Este juzgado había ordenado el sobreseimiento de la causa el 1 de octubre de 2018 al considerar que faltaban “indicios bastantes, tratándose en todo caso de meras conjeturas y sospechas” los argumentos esgrimidos para reabrirlo. La Audiencia estima ahora los recursos de apelación presentados por la Fiscalía y por la Abogacía del Estado contra el auto de archivo dictado por el juzgado y acuerda la reapertura para practicar las diligencias solicitadas por las dos partes, como que declare como testigo el donante —según el exjugador, se trata de su primo—.
Declaración al donante
El tribunal considera que existen “nuevos indicios en contra de los investigados”, por lo que acordó la reapertura de las actuaciones para que el juzgado de instrucción tome declaración al donante, residente en Francia, y para aclarar las discrepancias en las actas de consentimiento, según el auto consultado por los medios.
La justicia francesa rechazó una comisión rogatoria al entender que el supuesto donante no podía ser citado en calidad de investigado porque su legislación no castiga al donante vivo, según constata la Audiencia, “pero nada impide su declaración en calidad de testigo, así como que el mismo voluntariamente pueda someterse a un reconocimiento forense”.
Además señaló que no consta en el expediente clínico tramitado en Hospital Barnaclinic – Grup Hospital Clínic de Barcelona “ningún documento de identidad del donante, ni permiso de residencia de éste”.
La Audiencia recordó que en las conversaciones telefónicas intervenidas a Sandro Rosell, por las que se pidió reabrir la investigación del caso, se aludía a la compra ilegal de un hígado, y que el interlocutor, que no ha sido identificado, tenía un teléfono propiedad del club deportivo.
La Fiscalía había recurrido la decisión del Juzgado de Instrucción 28 de Barcelona de mantener el archivo de la causa y pidió que se citara como testigo al donante del órgano por medio de comisión rogatoria. También quería que la juez encargada del Registro Civil de Barcelona clarificara “a qué se deben las discrepancias observadas entre las distintas actas de consentimiento obrantes en el expediente”.
