Las responsables municipales evitan ofrecer fechas para la reapertura, aunque sea parcial, del tráfico, en la calle de San Juan, aunque en junio apuntaron a los meses de octubre o noviembre.
La apertura de al menos un carril en la calle de San Juan antes de que concluya la ejecución de todo el proyecto de urbanización integral, depende de las condiciones técnicas de la calzada, según ha explicado la alcaldesa, Clara Luquero.
Cuando a mediados de junio, tanto la regidora como la concejala de Obras, Paloma Maroto, informaron de los detalles de esta actuación, explicaron que al menos durante los primeros cuatro meses, o cuatro meses y medio, esta cuesta, principal acceso con vehículos al recinto amurallado, permanecería cerrada al tráfico, según las previsiones, aunque en todo caso la última palabra la tendrá el director de obras. Como se recordará, comenzaron el 18 de junio, por lo que ya ha transcurrido ese periodo de cuatro meses y medio.
Luquero indica ahora que hay que tener en cuenta que una vez pavimentada la calzada, aunque sea la mitad, “tiene que fraguar y estar consolidándose durante u mes”. A partir de entonces, señala, es cuando se planteará la apertura o no de la calle al tráfico rodado.
“Esto tiene que decidirse con los responsables de la obra a nivel técnico pero todavía no está decidido”, añade.
San Agustín
Por otro lado, la alcaldesa considera que las obras a mayores proyectadas en el tramo de la calle de San Agustín —en el tramo comprendido entre el Palacio de Justicia y Correos— no tiene por qué retrasar la apertura de un carril si las condiciones técnicas y de seguridad lo permiten. “Habrá que buscar vías alternativas al tráfico”, puntualiza.
Lo que sí quiere dejar claro en este momento es que cuando finalicen las obras se volverá a permitir el acceso a los vehículos y, por supuesto, también a los autobuses del servicio público de transporte urbano. “Nadie ha dicho que se vaya a cortar el tráfico indefinidamente, ni tampoco que los autobuses no vayan a subir a Colón, es un bulo que no tiene fundamento”, insiste.
Luquero sí admite las dificultades de movilidad para los conductores en el conjunto de la ciudad, aunque considera que los problemas son mayores por las obras de desdoblamiento de la variante, la carretera SG-20.
No cree sin embargo, que estos problemas empeoren sustancialmente con las obras de mejora del trazado en planta de la calle de San Gabriel, “porque es una cosa pequeñita, un saliente que está muy mal concebido”, dice.
