El actor José Sacristán explicó ayer que la subida del IVA cultural supone una medida «muy drástica» y un «golpe mortal» para el mundo del espectáculo.
Unas palabras a las que se sumó su compañera Silvia Marsó. «No se debería tratar igual económicamente a una sala alternativa con gente que lucha por traer la cultura a las generaciones mas jóvenes que a las grandes producciones a las que asiste una sociedad más acomodada, ya que de continuar así, se van a cargar el interés de la juventud», señaló .
Además, Sacristán destacó que esta medida que afecta al mundo de las artes en general y, en especial, al del teatro, es de una «brutalidad y torpeza impresionante».
Y es que la industria cultural genera en España 503.700 empleos y supone el 4 por ciento del PIB. La medida tomada por el Gobierno de subir el impuesto sobre los bienes y servicios de este ámbito en 13 puntos contraviene lo establecido en el artículo 44.1 de nuestra Constitución: «Los poderes públicos promoverán y tutelarán el acceso a la cultura, a la que todos tienen derecho», sentenciaron desde la Sociedad General de Autores Españoles (SGAE).
A los efectos propios de la crisis se suma esta subida del precio final, que dificulta la progresión industrial del sector, clave para el país. «Pero, además, limita el acceso a esa oferta por parte de las familias menos favorecidas, propiciando la brecha social».
La SGAE recordó que desde el inicio de la actual legislatura, el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte centró su línea de trabajo en una nueva regulación del mecenazgo, con el objeto de mejorar los recursos destinados a la creación a través del establecimiento de beneficios fiscales. Sin embargo, lamentó que «aquel objetivo parece haber sido abandonado».
