El escritor chileno Jorge Edwards abrió ayer el ciclo ‘Leyendo a Bolaño’, un homenaje al narrador y poeta fallecido hace diez años organizado por Acción Cultural en el marco del Hay Festival de Segovia.
De su compatriota, al que le llegó el éxito en la recta final de su vida y que ha sido elevado a mito sobre todo tras su muerte, valoró sus “momentos de gran culminación y verdadera genialidad” desde una prosa “libre y desmadejada”, tratándolo como “un descubrimiento de la literatura” a la vez que “patético” porque “sabía que estaba condenado a morir pronto”.
Antes, Edwards, en un monólogo de casi una hora en una sala del Palacio Quintanar repleta de público, describió a Bolaño como un autor “fascinado por las tabernas miserables de Santiago que frecuentaban los jóvenes poetas.
Edwards empezó a oír hablar de Roberto Bolaño cuando el veterano Premio Cervantes de 1999 era todavía un joven escritor. “Entonces Bolaño era conocido como poeta y mucha gente quedó extrañada cuando empezaron a salir sus novelas”. Respecto a la figura del escritor, Edwards sólo pudo decir que “es un autor muy unipersonal, de una voz que se disfraza de muchas cosas, que hace una creación a partir de un conflicto personal”. No en vano, “le llega el éxito cuando ya está muy enfermo”.
Edwards sigue escribiendo a sus 82 años, creando, dando que hablar y, por supuesto, que leer. En sus propias y modestas palabras, “trato de ser escritor”.
