El candidato del Partido Popular a la Alcaldía de Segovia, Jesús Postigo, afirmó ayer que una de las primeras medidas que adoptará si los segovianos le otorgan su confianza será la de apagar las cámaras que controlan el acceso de vehículos a la Plaza Mayor. Además anunció la creación de al menos dos aparcamientos disuasorios en las entradas de la ciudad, uno de ellos en las inmediaciones del Hospital General.
Postigo, acompañado de varios de los integrantes de su candidatura, presentó en la calle de Cronista Lecea, donde se encuentra una de las citadas cámaras, dos propuestas de su programa en materia de movilidad. La otra cámara está situada en la calle Barrionuevo.
En su opinión, es suficiente la señal de prohibido existente en los puntos de acceso a la plaza, así como la presencia disuasoria de agentes de la Policía Local.
Además comentó en “el candidato socialista, durante sus ocho años de mandato al frente del Ayuntamiento, ha practicado una política de prepotencia en materia de regulación del tráfico en el centro histórico de la ciudad, perjudicando a los vecinos residentes de la zona y a los visitantes a la ciudad”.
El candidato popular evitó utilizar el término multar o sancionar y usó verbos como enfriar o tamizar el tráfico y se ha mostrado partidario de cierta flexibilidad, aunque ha admitido que cuando se incumpla la norma sin justificación se debe aplicar una sanción. Para Postigo es importante tener en cuenta la opinión de los residentes y también de los comerciantes, hosteleros y propietarios de negocios de la zona de la Plaza Mayor antes de adoptar medidas restrictivas.
Para el Partido Popular el plan de movilidad, “pagado por la Junta” no ha sido bien aplicado y el equipo de Gobierno municipal capitaneado por Arahuetes ha fracasado en este ámbito.
La segunda de las propuestas de Postigo en esta materia es la puesta en marcha de aparcamientos disuasorios. Ha anunciado uno en las inmediaciones del Hospital General y otro en un lugar por determinar, ya que se ha mostrado partidario de estudiarlo con expertos, vecinos y todos los implicados en el tráfico de la ciudad.
Posteriormente, en un nota de prensa, el PP ha informado de que antes de la instalación de las cámaras de vigilancia, el gobierno municipal socialista “además de las tan caprichosas como inútiles lucecitas embutidas en el suelo de la Plaza Mayor, instaló un bolardo que ha causado numerosos accidentes en vehículos que pretendían circular por esta zona céntrica”.
Añadió que “los datos difundidos por el propio equipo de gobierno desvelan que, de mantenerse dicha política, las multas por la mera infracción de dicha normativa pueden ser muy importantes. “Unos 1.800 vehículos transgredieron en dos días la norma municipal, lo que, a razón de 200 euros, supone 360.000 euros de recaudación cada dos días, así como múltiples perjuicios a quienes transiten por la ciudad”.
