Cada vez que se inicia una legislatura, asistimos perplejos e indignados a la forma y manera de prestar juramento o promesa de acatamiento de la Constitución por muchos diputados o senadores.
De lo que no cabe duda, es que las normas fijadas por la Ley y el TC son insuficientes, pues toda norma ha de dar claridad y limitar controversias en la medida de lo posible. Por ello, desde el PP entendíamos que era la hora de establecer una fórmula clara, aséptica y precisa que, huyendo de excesos de todo tipo, permitiera el cumplimiento del acatamiento de la Constitución y acabara de una vez por todas con esta polémica a la que nos vemos arrastrados periódicamente.
En este sentido el Partido Popular ha presentado estas semana en el Congreso una Proposición para reformar el Reglamento del Congreso, para que por un lado establezca una formula consensuada para todos y, por otro, para que se sepa realmente si los parlamentarios cumplen o no con el deber del acatamiento de la Constitución Española.
El Partido Popular no ha presentado ninguna fórmula concreta y precisa, sino que ha sido una propuesta para abrir el diálogo y el espacio, para que entre todos podamos definirla y precisarla.
Pero hete aquí que el Partido Socialista, que en la campaña electoral dijo que llevaría este asunto al Congreso, se ha opuesto y ha impedido que la propuesta del Partido Popular salga adelante.
Como se ve con el actual Gobierno socialista, aquí ya nada es por casualidad, todo obedece a un plan establecido por el PSOE, PODEMOS e INDEPENDENTISTAS para cargarse lo que con tanto esfuerzo y sacrificio se ha conseguido en los últimos 42 años.
O todos luchamos para que así no sea, o si no, el actual bloque de izquierdas e independentistas en España harán un daño irreparable a nuestro actual sistema de libertad, igualdad y solidaridad de todos los españoles.
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(*) Diputado por Segovia.
