La aviación israelí bombardeó 30 objetivos en la Franja de Gaza después de que el Gobierno haya decidido continuar con su ofensiva contra los milicianos palestinos ante el rechazo tanto de Hamás como de la Yihad Islámica de respetar el alto el fuego propuesto por Egipto.
Según informó el Ejército israelí a través de Twitter, se han bombardeado «túneles de Hamás, 20 lanzaderas de cohetes ocultas, instalaciones de almacenamiento de armamento y otra infraestructura operativa».
«Hemos expuesto y dañado la red de túneles de Hamás y el programa de cohetes de largo alcance», aseguró el Ejército, incidiendo en que «el grupo terrorista se equivocó al pensar que se beneficiaría atacando a Israel». «Está pagando el precio por sus acciones», añadió.
El Gobierno israelí había aceptado la propuesta de tregua formulada por Egipto, que comenzaría a las 9:00 horas locales. En las seis horas siguientes, hasta que se ha decidido seguir adelante con ‘Margen Protector’, se han disparado 76 cohetes desde Gaza, de los que nueve han sido interceptados por el sistema antimisiles ‘Cúpula de Hierro’.
Asimismo, según se han hecho eco los medios de comunicación locales, también se habría bombardeado en las últimas horas una base de operaciones usada por miembros de la Yihad Islámica, otra de las principales facciones palestinas.
Por otro lado, cientos de miles de personas están sin agua en Gaza después de que las redes de alcantarillado y agua se hayan roto a causa de los bombardeos aéreos de Israel. Toda la Franja de Gaza corre el peligro de enfrentar de nuevo una crisis de agua, según alertaron las agencias de ayuda.
El octavo día de ataques causó un daño masivo en las infraestructuras y ha destruido al menos 560 casas, según declaró la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
