Los ladrones no descansan ni en Navidad. Hace poco más de un año, en vísperas de Nochebuena, una banda robó en más de una docena de viviendas de Fuentepiñel. Ahora, durante la madrugada del jueves, los delincuentes intentaron entrar a la iglesia de San Nicolás de Bari, sin lograr su objetivo, por razones que se desconocen.
Una vecina descubrió, a primera hora de ayer, cuando se disponía a abrir el templo para que los vecinos dejaran allí alimentos para una ‘Operación Kilo’, que alguien había pretendido romper las tres cerraduras existentes. “Reventaron una de ellas, que curiosamente no funcionaba; y las otras dos fueron manipuladas, aunque no rotas”, explicó horas después un vecino.
Avisada la Guardia Civil del suceso, se presentó poco después en la iglesia, a cuya puerta se había reunido un grupo de vecinos. Una primera inspección, ocular, reveló que los ladrones no pudieron entrar en la iglesia y, por tanto, tampoco sustrajeron ni obras de arte ni dinero. “Hubiera sido imposible que se llevaran una cantidad en metálico, porque hace ya mucho tiempo que el sacerdote no deja en la iglesia el dinero de las colectas”, señaló el mismo vecino.
La iglesia de Fuentepiñel ya ha sufrido un robo (junio de 2012), en una ‘oleada’ que afectó a los templos de Fuente el Olmo de Fuentidueña y Laguna de Contreras.