Domingo García amaneció ayer en calma. Los ánimos se tranquilizaron una vez que, al filo de la medianoche, se restableció el suministro de agua. Lo ocurrido el sábado “se asemejó a un motín”, según explicaba el teniente de alcalde, Fernando Gortazar. “La gente estaba indignada”, agregaba, a su lado, el juez de paz, Sebastián Sunil Swarnasinghe. El agua, una vez más, volvía a enfrentar a Domingo García con su vecino Bernardos, en cuyo término municipal se halla la captación.
El problema no es nuevo. “Se arrastra desde hace meses”, dicen los afectados. La gota que colmó el vaso cayó el viernes, coincidiendo con la llegada de los propietarios de segundas residencias. Apenas salía agua al abrir el grifo. La indignación generalizada tardó unas 24 horas en articular vías de actuación. El sábado, tras la misa, se celebró una “asamblea popular” en el centro cultural Santa Cecilia. Los presentes, cerca de medio centenar, apoyaron con su firma un sencillo texto en el que se pedía el “inmediato restablecimiento del suministro de agua”, principalmente por razones de salud pública, aunque sin olvidar otras, como la disminución del riesgo de propagación de un posible incendio.
La Guardia Civil, avisada por el vecindario, se ofreció a mediar en el conflicto, informando al alcalde de Bernardos, Jesús Pastor, de la situación. De acuerdo a la versión ayer facilitada en Domingo García, Pastor “acabó cediendo”.
En cualquier caso, los afectados advertían ayer que “el problema sigue”. No obstante, los de Domingo García decían haber aprendido una lección, revelando la estrategia que seguirán a partir de ahora. “La próxima vez que se haya un corte del suministro de agua, presentaremos una denuncia en el Juzgado de Guardia”, avisaba Gortazar, improvisado portavoz vecinal.
“No se puede tener a un pueblo sin agua, es un servicio básico”, insistía ayer una vecina, sin querer revelar su identidad. El juez de paz de Domingo García desvelaba que el pueblo ha informado de este asunto al Procurador del Común, en busca de su amparo. “Pedimos que se nos trate a todos por igual. Si hay restricciones, que sean para todos, ¿por qué en Bernardos no y aquí sí?”, indicaba.
En cualquier caso, en Domingo García se espera que el asunto se resuelva “en unas semanas”, dado que su Ayuntamiento, a la vista de las polémicas, ha impulsado la realización de un sondeo en el paraje denominado ‘Fuente Buena’. “Las obras ya se han realizado, únicamente faltan por solucionar unos trámites”, declaraba Gortazar, esperanzado en que, con la nueva infraestructura en funcionamiento, se cierre la cuestión.
Historia del sondeo
– 1952. Domingo García solicita a Bernardos poder suministrarse de su sondeo.
– 1954. Bernardos y Domingo García firman un convenio por el que el segundo recibe agua del primero.
– 1976. Nuevo convenio para el abastecimiento de agua, firmado por Bernardos, Domingo García y, como novedad, Migueláñez.
-1989. Nuevo convenio por el que los tres pueblos se comprometen a construir un nuevo depósito de agua. La nueva infraestructura fue financiada por la Diputación Provincial de Segovia (60%), Bernardos (20%), Migueláñez (12%) y Domingo García (8%).
La postura de Bernardos
Aunque el alcalde de Bernardos, Jesús Pastor, evitó ayer hacer declaraciones sobre el asunto, “para no echar más leña al fuego”, en la página web de la localidad, aparece un extenso artículo que explica la postura de la corporación. En el mismo se afirma que “no existe ninguna obligación por parte del Ayuntamiento de Bernardos con respecto al suministro de agua a Domingo García, ya que el acuerdo que regía el suministro fue denunciado por falta de pago y, en consecuencia, ha perdido vigencia en lo que nos vinculaba al Ayuntamiento de Domingo García. El mantenimiento del suministro es ‘de facto’ y no tiene base jurídica”.
La corporación de Bernardos aprobó, el 26 de abril, “restringir el suministro del excedente de agua a Domingo García a 400 litros por contador, lo que supone una dotación de 100 litros/día/persona, computando cuatro personas por contador”.