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Incendio en ‘El Hospitalillo’ de San Clemente

por José María Martín Sánchez
4 de abril de 2025
en Tribuna
JOSE MARIA MARTINDEPORTES 1
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Hoy llega alimentada esta página con ‘disertaciones’ breves, dotadas de calidad indiscutible –no porque lo diga yo-, que llevan a su vez al lector (entiéndase en aplicación del lenguaje inclusivo), a hacerse una pregunta inteligente. ¿Merece la pena comenzar a leer?… Yo ahí lo dejo.

Fuego en el hospital.-Fecha, día 16 de julio de 1760. Se celebraba la festividad de la Virgen del Carmen. Siendo las 11,10 de la mañana – hora de reloj de bolsillo-, se inició un fuego en el conocido como ‘Hospitalillo de la Encarnación’ en la parroquia de San Clemente. Se dijo entonces que fue por un descuido que se tuvo con la lumbre. Se quemaron cinco casas, sin desgracias personales. Las llamas ‘subieron muy alto’ y nadie vio el incendio hasta que no se hubo apoderado de las casas del hospital.

Retablo del señor San Frutos.
Retablo del señor San Frutos.

Tres tallas de peso.-Otra noticia de aquel siglo. Fue en el mes de abril de 1775 cuando llegaron a la Catedral las tallas de San Frutos y sus hermanos Engracia y Valentín. También santos. Se trasladaron en galeras tiradas por mulas que fueron aparcadas a la entrada. Retirados los animales de las galeras, para entrar en el recinto santo fueron los hombres los que las arrastraron. Las dejaron junto al Claustro y fue necesaria la fuerza conjunta de diez hombres para descargar cada santo y llevarlo a su lugar de estancia.

Martín Pérez de Ayala.- Nombrado obispo de Segovia en 1560 –lo relata Colmenares en la ‘Historia de Segovia y…’, páginas 525-535, y también su biógrafo, el valenciano Vicente Cárcel Ortí-, tuvo graves problemas con la diócesis, donde se enfrentó duramente al Cabildo, llegando a ordenar el encarcelamiento, en el Castillo de Turégano y en la cárcel de Fuentepelayo, del escribano y notario de la Catedral. Dos años después, aún con aguas revueltas, fue nombrado arzobispo de Valencia.

Los canónigos de Segovia se habían opuesto al nombramiento. No le querían. Había sido nombrado a petición de Felipe II. Pérez de Ayala fue un gran teólogo. Estuvo en el Concilio de Trento, y regresando a la diócesis de Segovia en 1564 –cuatro años de ausencia habían transcurrido-, intentó aplacar la resistencia de los canónigos. Dado que había estado muy poco tiempo en la ciudad, realizó una visita a la diócesis, una actividad que estaba en el programa de todo obispo nuevo que llegaba.

Martín Pérez de Ayala, obispo de Segovia.
Martín Pérez de Ayala, obispo de Segovia.

Un buen pellizco.-Por aquello de que puede no saber lo que sigue, lo expongo. Por tasación realizada a la marcha de Segovia, expulsión por decisión Real de los Jesuitas, se llevó a efecto la valoración de sus propiedades en Segovia. La suma total alcanzó 1.178.563 reales. Descontado de esta cantidad lo que debían, quedó un líquido de 990.435 reales. El referido recuento tiene fecha de 1769.

Venta legal de aceite.- Mes de diciembre de 1920. La alcaldía que presidía Pascual Guajardo redacta la siguiente nota: ‘Desde el día 20 del actual mes de diciembre se venderá aceite en los despachos de la Fonda del Aceite, San Francisco, y en la plazuela de la Trinidad. Solo podrán acceder al producto las personas que vayan provistas de la correspondiente tarjeta, que ya fueron enviadas desde las dependencias oficiales del Ayuntamiento. La cantidad que se podrá retirar es de 1,5 litros/persona, o, en su defecto, medio litro cada tres días, por cada una de las tarjetas. El precio será de 1,60 pesetas/litro’.

Nada se decía en la nota sobre la clase de aceite (si tenía 0,5 de acidez; si era de aceituna; de oliva virgen, de oliva ‘simple’, de orujo… por lo que algunos ‘plumillas’ que lo querían saber todo para transmitirlo, respondieron de forma tajante: ‘es aceite’. Respuesta que dejó más tranquilos –seguro de toda seguridad-, a los usuarios compradores.

Colegio de señoritas ‘El Iris’.-Fue una noticia diferente. Nos vamos al año 1866. El colegio se ubicaba entonces en la Plazuela de San Martín, 7; en 1885 se trasladó a la Plazuela de Los Espejos, donde Enrique IV tuvo su palacio, y se ubicó un colegio de señoritas –así lo describía su publicidad-, que contaba con ‘gimnasio higiénico’ y al que podían acudir ‘todas las señoritas de Segovia, aunque no pertenezcan a él’. Lo dirigía Adelaida Marco de Labandera, maestra superior, y el profesor era, a su vez, el que ejercía en la Academia de Artillería.

Una de ‘animales’. Estuve dudando si insertarla o no, ya que hay lectores sensibles que pueden sentirse afectados. La encontré en El Adelantado de 1914. Sucedió que el Ayuntamiento de ésta la nuestra, en perfecto uso de sus atribuciones sancionadoras, impuso sendas multas, una de 2,75 pesetas al ciudadano Mariano Ginovés, y otra al también ciudadano Pedro Aragoneses en la cuantía de 1,25 ¿Motivo? ‘por tener ambos pastando quince gallinas de su propiedad en los Jardinillos de San Roque’.

¡A quién se le ocurre! Llevar a jardín público animales domésticos tan ‘dañinos’. La noticia no hacía referencia si la sanción se imponía por cuestión de huevos… de gallina.

En Turégano. Los ladrones asentaron un buen golpe. La noticia: ‘entraron por el techo de la Casa Ayuntamiento y más concretamente donde se encontraba la caja de caudales. Se llevaron todo, un total de ¡10.000 reales! Conocían perfectamente el lugar y trabajaron sobre seguro. Dieron un buen golpe y, que se sepa, no fueron encontrados’. Año 1914.

La noticia aparecía en ‘El Reformista’. Periódico fundado por el abogado Lope de la Calle Martín y dirigido por el médico Eulogio Martín Higuera, que permaneció abierto entre 1888 y 1890. El cierre de produjo en este último año, si bien los citados fundaron seguidamente ‘La Legalidad’, que permaneció hasta 1914.

Gobernador.- Fue en la noche del 31 de enero de 1884 cuando, en su domicilio del Gobierno Civil, falleció de forma repentina el gobernador José de la Guardia. Tan solo llevaba nueve meses en el cargo. Sus restos fueron enterrados en el cementerio del Santo Ángel, en la ciudad.

El caminar del mundo es así, variado.

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Edición digital del periódico decano de la prensa de Segovia, fundado en 1901 por Rufino Cano de Rueda

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