El vicepresidente de la Junta de Castilla y León y miembro de Ciudadanos (Cs), Francisco Igea, expresó este jueves que en esta Comunidad «nadie» del Partido Popular le ha ofrecido a los cargos y militantes de Cs cambiar de partido y en su caso subrayó: «No me voy a afiliar al PP, punto».
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, preguntado por el ofrecimiento del PP para que cargos y militantes de Cs cambien de formación, Igea indicó que no es muy partidario de manifestaciones «categóricas», pero entiende que en este contexto es necesario expresar que él no se va a afiliar al PP y nadie se lo ha pedido por el momento.
Preguntado por si confía en la palabra del presidente del PP y de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, el vicepresidente contestó que sí, porque se trata de «un hombre honesto», que «de ninguna de las maneras es partidario de una estrategia de compra de voluntades en mi partido», en referencia a lo que pueda ocurrir con cargos y militantes de Ciudadanos y un supuesto trasvase al PP.
«Se puede hacer muy buena política aunque te achiquen el espacio»
Ante el «goteo» de cargos de Cs que dejan el partido y se suman al proyecto popular, ha opinado que se trata de una «estrategia» que ya ha visto en casos anteriores y que no le preocupa siempre que en su partido sean «capaces» de «tener claro que el espacio existe», en referencia al centro liberal. «Se puede hacer muy buena política aunque te achiquen el espacio», expresó sobre la campaña «más polarizada» que prevé para la Comunidad de Madrid y ante la que en su opinión Ciudadanos debe responder con «moderación, inteligencia, propuestas e ideas».
Sobre la situación que atraviesa su partido, Igea reconoció su preocupación y ha ironizado con que desconoce si va a dejar de existir antes él o Ciudadanos, pero aseguró que los próximos dos años los va a dedicar a seguir siendo vicepresidente de la Junta de Castilla y León, «guste o no».
Tudanca y la «compra de voluntades»
Igea cargó contra el líder autonómico del PSOE y aspirante a la Presidencia de la Junta en la moción de censura, Luis Tudanca, a quien ha acusado de estar «ejerciendo la corrupción» cuando pretende «comprar las voluntades» de los doce procuradores de Cs en las Cortes para que apoyen la moción de censura en la Comunidad.
La política en Castilla y León es «menos sexy que las batallas de banderas de Madrid»
En opinión del vicepresidente de la Junta, la política en Castilla y León es «menos sexy que las batallas de banderas de Madrid», con acciones más «tristonas» como la de aprobar medidas, que en su opinión sirven más a los ciudadanos que las estrategias de partidos centrados en la confrontación electoral y en los «juegos de tronos y de cartas» más que en la gestión de los problemas. Negó que la líder nacional de su partido, Inés Arrimadas, ni la dirección autonómica de Cs le hayan trasladado la posibilidad de que prospere la moción de censura en esta Comunidad y también que haya habido contactos con el PSOE en este sentido.
De hecho, ironizó con la posibilidad de que «Tudanca haya hablado con alguien y también que ese alguien no sea nadie», hasta el punto de que ha comparado la estrategia socialista con un pasaje del humorista José Mota, basado en que «alguien ha hablado con alguien de algo en alguna parte», pero sin concretar. En este sentido, retó a Tudanca a que deje la «tendencia a la cobardía y el retraimiento» y diga con quién se ha reunido exactamente y de qué han hablado, ya que no ha utilizado la «vía ordinaria» y transparente que se comprometió a utilizar, sino que lo hace «a oscuras, con reuniones privadas y sin exponerse».
