La semana pasada fue en la renovada cancha de baloncesto de las pistas deportivas de Cuéllar : una desagradable pintada aparecía en el suelo azul y, como explicaban desde el Ayuntamiento “su restauración y dificultosa limpieza supone un coste que pagamos todos los vecinos”. Esta semana, el lugar elegido para demostrar “falta de civismo” era la puerta de la Biblioteca Municipal: es la segunda ocasión en menos de una semana en la que se ha robado el buzón que normalmente está colocado junto a la puerta de entrada.
Desde el Consistorio piden colaboración ciudadana para identificar a los autores de estos actos vandálicos. “No toleramos el vandalismo en nuestra villa, no permitimos que haya gente con tan poco civismo, capaz de destrozar, ensuciar y robar en su propio hogar”, señalan en redes, con la esperanza de que terminen estos actos.
