El CD La Granja hizo ayer dos favores. Uno a sí mismo, jugando un completo encuentro frente al Almazán, uno de los mejores equipos del grupo octavo en la presente temporada, y otro a la Gimnástica Segoviana, impidiendo que el conjunto soriano sumase un solo punto, con lo que los azulgranas ya son quintos en la tabla. Pero sin duda, lo mejor fue la imagen ofrecida por el equipo de Javi Jadraque, liberado de la presión de la permanencia, y que ahora apunta a un puesto entre los diez mejores equipos de la Liga.
Y eso que el inicio del choque poco hacía presagiar su final, puesto que el Almazán salió con ambición, y tanto Martín como zazu dispusieron de buenas ocasiones para haber colocado el 0-1 antes incluso de que se cumpliese el primer cuarto de hora de partido. Pero también antes incluso de que el cronómetro señalase el minuto 15, los de casa ya habían marcado el 1-0, en un libre indirecto que Guillermo logró introducir en la portería defendida por Diego.
El tanto le vino de maravillas al equipo de Jadraque, que se asentó mucho sobre el terreno de juego, tanto como comenzó a descomponerse un Almazán que en el tramo final del primer tiempo encajó el segundo tanto, obra de Mario tras recibir una buena asistencia de Ricardo.
La segunda parte comenzó como lo hizo la primera, con el equipo soriano intentando marcar pronto, pero encajando también pronto un gol que acabaría por ser decisivo, ya que Ricardo marcó a puerta vacía después de que Mario le devolviera la asistencia de gol para que el delantero granjeño marcase el 3-0, y el Almazán se quedase con diez jugadores por la expulsión del portero soriano, lo que terminó por significar la puntilla para el conjunto que dirige Luis de Miguel, que estuvo tan cerca de marcar el gol del honor como de recibir el cuarto tanto de un CD La Granja que se dio un homenaje después de varios partidos de sufrimiento.
