El presidente francés, François Hollande, pidió a los miembros del Parlamento británico que respalden la petición del ‘premier’, David Cameron, de unirse a los ataques aéreos contra posiciones del autodenominado Estado Islámico en suelo sirio.
La petición de Hollande fue revelada ayer, pese a haberse lanzado durante la reunión de jefes de Gobierno de la Commonwealth, celebrada el viernes en Malta. “Queremos destruir el terrorismo. Espero que la Cámara de los Comunes sea capaz de acceder a la petición del primer ministro Cameron”, expresó el mandatario francés.
Cameron defendió esta semana que ha llegado el momento de tomar una decisión de sumarse a los bombardeos aéreos contra el grupo terrorista, argumentando que Reino Unido no puede “subcontratar su seguridad a otros países”.
Las palabras de Hollande parecen haberse hecho eco de las de Cameron cuando aseguró que la coalición contra el grupo terrorista defendía “nuestra visión de la Humanidad”. “El hombre es el peor enemigo del hombre”, afirmó Hollande. “Podemos verlo en el terrorismo. Durante varias semanas he viajado por países de la Unión Europea y por todos los países afectados, donde el terrorismo es importante. Es la defensa de nuestra visión de la Humanidad”, espetó.
La petición del presidente galo podría verse como un llamamiento a los diputados laboristas que dudan si respaldar o no la campaña en Siria y cuya votación al respecto se celebrará en la Cámara de los Comunes la próxima semana.
Mientras tanto, el ministro de Interior francés, Bernard Cazeneuve, reveló que desde los ataques del pasado 13 de noviembre en París se le denegó la entrada al país a cerca de 1.000 personas durante el estado de emergencia bajo el que se encuentra Francia.
Cazeneuve añadió además que 4.000 personas fueron interrogadas en los 285 controles fronterizos establecidos desde los ataques ocurridos en la capital gala, y se llevaron a cabo más de 1.800 registros, aunque uno de los terroristas partícipes en la masacre, Salah Abdeslam, continúa sin aparecer.
Las operaciones policiales documentaron 212 personas detenidas durante los registros para su posterior interrogatorio y la confiscación de 318 armas, incluidas 31 de grado militar.
Durante los tres meses de duración determinados para el estado de emergencia, toda manifestación pública esta prohibida, las fuerzas de seguridad cuentan con mayores poderes en términos de registro y vigilancia y se refuerzan los controles fronterizos.
