El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, reiteró ayer su apuesta por buscar un Pacto de Estado en materia universitaria, al tiempo que ha vuelto a reclamar una prueba de acceso a la universidad única para el conjunto del país.
Así lo sostuvo durante el acto de apertura del curso académico de las universidades de Castilla y León 2018-2019, que este año se ha celebrado en la de Valladolid, donde se refirió al “grave problema” de la “reposición del profesorado” en un contexto de “fuerte envejecimiento de las plantillas”, cuestiones todas ellas que se ha comprometido a trasladar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su próxima reunión.
En su discurso, en el que el presidente no hizo ninguna alusión a la polémica de los másteres, sí se ha referido a la bajada de las tasas académicas, del cinco por ciento para este curso con el compromiso de situarlas en el siguiente en la media de las existentes en España, para paliar unos precios públicos que en su día soportaron la presión de la crisis económica, a lo que Herrera se ha referido como “decisiones tan difíciles como necesarias”.
Herrera destacó el papel de las universidades de Castilla y León, las cuales cuentan con 8.000 profesores y casi 3.700 profesionales de administración y servicios para formar a cerca de 83.500 alumnos, además de lo cual “desarrollan una actividad académica, investigadora y de relación con su entorno que sin duda es uno de los elementos más dinámicos y de mayor importancia en la vida de la Comunidad”.
Entre los grandes retos de las universidades para “adaptarse a nuevos paradigmas”, el presidente de la Junta advirtió de que “no cabe ningún inmovilismo”, a pesar de lo cual “es esencial la estabilidad”, especialmente en su faceta financiera, de la cual ha presumido de preservar en la región “de forma poco habitual en España”, lo cual ha achacado al “rigor” de los equipos de gobierno de las universidades o los convenios de saneamiento financiero, además del citado esfuerzo en cuanto a los precios públicos.
En este contexto, ensalzó el “esfuerzo de los claustros” y repasó algunas de las nuevas inversiones en infraestructuras, equipamientos y eficiencia energética, como la reforma de la Sede Mergelina, el edificio de I+D+i en Soria y la segunda fase del Campus de Segovia en la Universidad de Valladolid; la rehabilitación del Colegio de San Bartolomé y el proyecto de Centro Internacional del Español en la de Salamanca; la reparación de las cubiertas del Pabellón de Gobierno de la de León, o la renovación del lucernario de la Facultad de Derecho y los acondicionamientos del los hospitales del Rey y Militar en la de Burgos.
