El italiano Antonio Scurati ha escrito una novela sin ficción sobre la vida de Mussolini, el dictador. He leído que es la primera vez que se escribe una obra así sobre este importante personaje del siglo XX, nadie se había atrevido. La obra se compone de tres libros, este es el primero y ya ha ganado uno de los premios más importante de las letras italianas, además de ser allí un éxito de ventas. Y creo que, todo con justicia, pues estamos ante una novela, ante un libro importante. De los que dejan huella. De los que hay que leer.
Esta primera entrega narra la vida de Mussolini desde los años 1919 al 25, los años de van desde la creación del movimiento fascista hasta que es nombrado primer ministro. Me cuesta trabajo llamar novela a este libro, pero el propio Scurati, en una entrevista, me ha sacado de dudas para esta novela y para el futuro, dice Scurati: “La historia es una invención a la que la realidad aporta sus propios materiales”. Me parece definitivo.
La novela empieza contando que Mussolini era socialista y cómo va a ser capaz de aglutinar todo el descontento que había en Italia en aquellos años, por una parte, los soldados que habían participado en la Primera Guerra Mundial y que, a pesar de ser vencedores, ellos (y el país en general) consideran que no se ha tratado bien a Italia en los tratados de paz firmados por los aliados. Y, por otra parte, existe gran malestar en el mundo rural, en los agricultores, cansados de reformas inútiles, de promesas incumplidas, etc. extensivo al resto de obreros italianos. Además, la situación social, económica e institucional era delicada y en ciertos momentos de la novela parece más un estado fallido. Violencia en las calles, en las fábricas, etc.
Los veteranos de guerra se sienten inadaptados en esta Italia y sacan a relucir su fuerza, su violencia, su fanatismo. Y Mussolini sabe aprovechar todo esto. Es ambicioso, astuto, manipulador, con dotes oratorias, vanidoso. Dice que el fascismo no hace política, la combate. No tiene programa ni ideología política. Es un gran oportunista, pragmático empedernido, voluble, va cambiando de estrategias para conseguir el fin. Uno de sus lemas es que el miedo es un sentimiento político más poderoso que la esperanza. Y lo lleva hasta el extremo.
Hay que decir de esta fantástica novela que todos sus personajes son reales y, muy importante, que está narrada desde el punto de vista de los fascistas, desde dentro, cuando lo habitual en otras dictaduras es contarlo desde el lado de las víctimas. Esto último le ha ocasionado algunas críticas a Scurati por parecer que quería lavar la imagen de los fascistas, pero a mi me parece que hay que agradecerle el esfuerzo por tomar distancia ideológica, narrar los hechos, contar cómo y porqué se hicieron las cosas, es encomiable el esfuerzo por entender los pensamientos de los protagonistas y que, luego, el lector opine y, les puedo garantizar, que cuando llegas al final, odias al Duce.
Rigurosa y profusamente documentada, aporta cartas, informes policiales, diarios íntimos, recortes de prensa, etc. Consigue sumar al rigor de la investigación histórica, el estudio de la psicología de los personajes, recrear sus emociones, lo que conlleva un riesgo importante, pero consigue que todo sea verosímil y dolorosamente real. Es una novela de más de 800 páginas que resume el trabajo de muchos años de investigación y que, a pesar de su extensión, se lee con interés, con páginas memorables como en las que cuenta la “marcha sobre Roma” que terminaría con la claudicación del estado y del propio rey proclamándole presidente. Es una narración trepidante, con una emoción de novela de aventuras. En general, mantiene el ritmo y el interés hasta el final.
Plasma un retrato magistral del dictador. Estremece ver la manipulación de la verdad y cómo se gana la voluntad del pueblo con una ideología totalmente tóxica. Es espeluznante ver como las elecciones de mayo de 1924 las gana con una amplísima mayoría. Y es sintomático lo que publicó la prensa internacional aquellos días: “…una hermosa y alegre revolución de jóvenes vigorosos, una revolución incruenta, un experimento decisivo, el amanecer de una nueva era…”. ¡Qué pronto se olvidan los muertos y qué bien lo saben ellos! Ahora pienso, que el fascismo ha vuelto envuelto como populismo, partidos de extrema derecha y extrema izquierda, partidos independentistas, partidos herederos de terroristas, etc. con los elementos de la teoría y la práctica fascista. Aunque faltan líderes con ese carisma. El peligro actual es evidente y por eso les decía, que estremece leer en el libro la manipulación, las mentiras y los engaños similares a los actuales.
Las últimas decenas de páginas son casi una novela corta independiente, narra el secuestro y asesinato por los fascistas, de un diputado de la oposición que “molestaba”. Cómo lo hacen, esconden el cadáver, salta a los medios, las presiones, declaraciones, un cambio de la ley electoral en medio de todo ello salva al presidente, páginas vertiginosas que terminan con el célebre, dramático, brutal discurso de Mussolini en el parlamento, asumiendo todas las responsabilidades y el coro final: ¡todos contigo presidente!, con el que termina el libro. ¿Les suena?
Por esto y por muchas otras razones es un libro monumental, que posiblemente nos atraiga por ese oscuro encanto de las cosas que, al mismo tiempo, nos horrorizan. Yo estoy ya impaciente por leer los siguientes. Gran novela, será un clásico con los años. No solo recomendable, sino de obligada lectura. Léanla, en un libro de verdad, no en uno digital y opinen, conmueve.
