El presidente del Colegio de Médicos de Segovia y responsable del Registro de Agresiones del consejo regional de colegios, Enrique Guilabert, ha alertado del aumento de agresiones a sanitarios de Atención Primaria, los que prestan servicio principalmente en centros de salud de Castilla y León, así como también una mayor violencia física ejercida sobre mujeres profesionales de la Sanidad.
Con motivo de la celebración ayer del Día Nacional Contra las Agresiones a Sanitarios, Guilabert ha insistido en “tolerancia cero” hacia este tipo de comportamientos violentos.
La muerte de una sanitaria, Eugenia Moreno, hace cinco años en Murcia, fue el detonante para que la Organización Médica Colegial pusiera en marcha el Observatorio de Agresiones con la colaboración de todos los colegios de médicos españoles. Durante esta semana un lazo cruzado de color dorado es el distintivo de los sanitarios para reivindicar el respeto a estos profesionales.
El responsable del citado registro regional, ha destacado que en Castilla y León el médico, cuando está desempeñando su actividad profesional, está considerado como autoridad pública, lo que conlleva que estas agresiones se contemplen como delito contra la autoridad. Además, gracias a un convenio de colaboración, firmado en marzo de 2011, hay una buena coordinación entre Sacyl y el Consejo de Colegios de Médicos de Castilla y León, lo que permite tener un registro fiable de los nuevos casos para establecer mapas de riesgo y detectar su evolución.
La prevalencia de agresiones en Castilla y León durante 2014 se ha mantenido similar en números absolutos en relación con años anteriores. La solicitud de asistencia a los servicios jurídicos de los colegios de médicos de la Comunidad Autónoma para atender estas agresiones se ha producido en 26 casos.
