El Ayuntamiento dará por fin un uso efectivo al edificio del CIDE, el inmueble construido en la salida hacia Madrid, donde se programó hace años el Círculo de las Artes y la Tecnología (CAT), y que todavía no se ha inaugurado.
Así lo desveló ayer el alcalde de Segovia, José Mazarías, quien anunció que el Centro de Innovación y Desarrollo Empresarial (CIDE) permitirá descongestionar algunas de las dependencias municipales, ya que se trasladarán a lo largo de 2024 gran parte de los servicios municipales, excepto aquellos que requieren la atención directa al ciudadano, que “seguirán en sus ubicaciones actuales”, sobre todo en la Plaza Mayor.
“Que nadie piense que el actual Consistorio va a quedar vacío o va a cerrarse. Va a seguir a pleno rendimiento y con las personas que trabajan prestando servicio de atención al ciudadano. Para todo lo que son trámites presenciales y para actos institucionales de representación y de protocolo seguirá operativo”, aclaró Mazarías.
Con esta decisión, el equipo de Gobierno busca un doble objetivo: dar una utilidad real al inmueble situado frente a la Choricera, en la calle Campos de Castilla. Y mejorar la gestión administrativa municipal.
Se trata, dijo Mazarías, de una solución a los “problemas de espacio” que sufren los diferentes departamentos en la Casa Consistorial. “Hay un montón de trabajadores que están en condiciones absolutamente deplorables, y concejales que ni siquiera tienen despacho, como la que me acompaña”, dijo ayer el alcalde en compañía de Rosaría Serrano, responsable de Hacienda, en la rueda de prensa de presentación del proyecto de presupuestos para 2024.
EFICACIA
En su intervención, Mazarías explicó que en el CIDE se van a concentrar los servicios municipales “para ganar en eficacia y en ofrecer mejor servicio a los ciudadanos”. “Supondrá una mayor eficacia y operatividad”, añadió a la vez que hizo hincapié en los mensajes dados por los propios funcionarios “que nos dicen que pierden mucho tiempo en desplazarse desde Urbanismo hasta el Ayuntamiento, o desde Innovación a Urbanismo; por tanto, esta concentración va a permitir una mejoría de la operatividad”.
Por otro lado, dijo que este inmueble, cuyo mantenimiento “nos cuesta más de 750.000 euros”, no podemos mantenerlo vacío, “ni siquiera a medio gas”.
En este edificio estarán agrupados, todos los concejales del gobierno local y el propio alcalde, Sumarán más de 180 empleados: seis de Alcaldía, trece de Secretaría, Gobierno e Interior; treinta y cinco de Urbanismo (incluido Evisego); once de Economía y Hacienda; ocho de Personal; diez de Cultura y Servicios Sociales; veinticinco de Servicios e Infraestructuras; trece de Turismo; diez de Tecnología, doce de Segovia Activa; y trece de Obras, Servicios y Tráfico. En total, casi 200 de un total de más de 560 empleados municipales con los que cuenta el Ayuntamiento, incluidos los funcionarios de Policía Local y de Bomberos.
El inmueble dispondrá de un aparcamiento destinado a los propios empleados municipales que requieran de un lugar donde estacionar su vehículo.
De cualquier modo, la Alcaldía conservará su despacho en la Plaza Mayor, donde también se seguirán celebrando reuniones protocolarias y encuentros oficiales.
PROYECTOS
La distribución de los 9.000 metros cuadrados que conforman el CIDE se reparten con una planta baja destinada a innovación y auditorio, donde se desarrollarán actividades a demanda mediante el alquiler de espacios. En la planta primera se ubicarán las empresas que quieran instalarse en el inmueble, o dependencias del Ministerio de Educación “si mantiene su interés” de llevar a cabo los proyectos anunciados para Segovia, “aunque no tenemos ningún contacto”, matizó el alcalde.
El edificio está recepcionado y se están elaborando estudios técnicos para ver qué espacios se pueden alquilar a empresas externas que quieran implantarse en este inmueble.
El alcalde descartó que todo este proceso requiera de hacer más inversiones dado el equipamiento con que cuenta ya el edificio del CIDE y el mobiliario de las propias concejalías.
Con esta decisión, el alcalde de la ciudad aseguró que se cumple con una de sus promesas electorales. Y aunque dijo que no hay una agenda concreta para el traslado de las dependencias municipales, sí se mostró convencido de que podrá hacerse a lo largo del año 2024. Además, con el traslado se podrán dejar de utilizar otros inmuebles en los que se encuentran algunos servicios municipales, e incluso enajenar algunos de ellos. Citó el caso de los servicios de Innovación y Proyectos Europeos, que ahora están en el barrio de La Albuera, y que “pueden pasar a manos privadas; o donde está Urbanismo, que podrían contar con algún proyecto deportivo, dada su ubicación; o el de Servicios Sociales, que también podría tener otros usos”, agregó el alcalde.
Todo este plan va aparejado a la puesta en marcha, como ya anunció Mazarías, de un nuevo aparcamiento disuasorio destinado al turismo que llegue en fechas puntuales, y de un recinto ferial, que irá implementado con un servicio de autobuses lanzadera.
«Apagón del centro histórico»
Con esta medida “Mazarías contribuye al apagón del casco histórico trasladando dependencias municipales al CIDE”. Así de contundente se mostró la portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento, Noemí Otero, tras conocer la decisión del alcalde.
“Que el CIDE se convierta en la sede del Ayuntamiento supone la escenificación del fracaso en la gestión”, ha criticado, Noemí Otero, al conocer las intenciones del equipo de gobierno de Mazarías en este sentido.
“Con este uso se pone de manifiesto la incapacidad de atraer proyectos empresariales para la ciudad a este edificio y conseguir que deje de ser un coste para la ciudad”, ha denunciado la edil liberal.
Otero ha manifestado que “convertir un edificio llamado a ser la innovación y el desarrollo empresarial puntero de la ciudad en oficinas municipales, con un coste de 750.000 euros al año, parece una inocentada”.
“Mazarías se ha rendido sin ni siquiera intentarlo”, ha lamentado la portavoz de la formación naranja. La edil liberal ha reprochado que el equipo de gobierno ha optado por el camino fácil: llenar el CIDE de oficinas municipales para tener el edificio con un uso, sí, pero que no tiene nada que ver con el fin para el que se creó, impulsar el desarrollo económico de la ciudad”.

