Por su historial debería ser reconocido como uno de los más grandes deportistas españoles, pero es posible que muchos aficionados al deporte no sepan quién ha sido este atleta que desde que en Barcelona 92 inició su andadura olímpica no ha faltado a ninguna de sus citas representando a España en 50 kilómetros marcha, siendo los Juegos de Tokio los últimos que disputó como deportista de alta competición.
Jesús Ángel García Bragado suma sus ocho participaciones en los Juegos Olímpicos, aspecto en el que solo se ve superado por cuatro deportistas teniendo en cuenta todas las disciplinas. Este dato ya sería por sí solo suficiente para tener muy presente a este deportista en la historia del deporte español, y que esto no sea así pone de manifiesto el escaso reconocimiento que damos al deporte en general.
García Bragado ha participado también en trece campeonatos mundiales siendo en 1993 campeón del mundo. Su retirada la ha llevado a cabo a los 51 años, edad muy avanzada para la vida deportiva y en una disciplina como la suya el mérito es aún mayor.
Llegar a esta edad al más alto nivel dice mucho de la constancia, disciplina y esfuerzo que ha desarrollado a lo largo de su carrera. Por supuesto las lesiones le han respetado, quizás el conocimiento del cuerpo que tiene por su profesión, podólogo, tenga también algo que ver en esto.
Como he comentado creo que este deportista debe tener el más alto de los reconocimientos, aunque su deporte no sea mayoritario sus logros pueden servir como aliciente a otros deportistas que vean que con trabajo y sacrifico se puede llegar muy lejos y mantenerse en el tiempo.
(*) Esta columna fue enviada por Raquel García el pasado 31 de marzo. Sirva como reconocimiento y homenaje a una deportista, profesora, amiga y columnista de El Adelantado que supo estar a la altura en cada una de las facetas de su vida. Descanse en paz.
