Sin Francia, Chagall no sería Chagall. Así lo confesó el pintor galo de origen ruso-judío en sus memorias, Mi vida. Y este año, su país adoptivo rinde homenaje a esta estrecha relación con el artista dedicándole tres grandes exposiciones en París y Niza.
En 1973, la localidad bañada por el Mediterráneo inauguró un museo dedicado a Marc Chagall (1887-1985), que ahora celebra su 40 cumpleaños. Chagall falleció en 1985 en Saint-Paul-de-Vence, convirtiéndose en el primer artista al que Francia honraba en vida con un museo.
«¡París! Para mí, no había palabra más bella», decía el pintor nacido en Vitebsk sobre la ciudad del Sena, a la que llegó en 1910. Bajo el título Chagall entre guerre et paix (Chagall entre guerra y paz), la capital gala reúne también algunas de sus obras más aclamadas del período de posguerra, como su Paisaje azul de 1949 o La danza de 1950-1952. La muestra, en el Musée du Luxembourg, presentará hasta el próximo 21 de julio más de 100 lienzos y gouaches de los primeros cuatro años del artista en París.
Chagall vivió una revolución, dos guerras y dos exilios, acontecimientos que se reflejan en muchos de sus lienzos. «He realizado numerosos viajes. He visto muchos países (…) Pero en mi camino me he dado muchos golpes. He visto guerras, revoluciones y todas sus consecuencias. Pero también he conocido a personas extraordinarias, cuya creatividad, encanto y contacto, a menudo, me han conmovido y convencido para no abandonar», aseguró en una ocasión.
Los cuadros de Chagall reproducen siempre desgracias y esperanza, dolor y dicha. Así sucede en Exodus, en el que el pintor aborda el tema de la Shoah, con un oscuro fondo y la imagen del crucificado en dorado. Esa luz es símbolo de su fe en lo positivo y el único punto luminoso entre la oscuridad del lienzo. La pieza refleja, entre otras cosas, la tragedia de los pasajeros judíos a bordo del Exodus en 1947, cuando fue detenido por las autoridades británicas en su viaje a Palestina.
El tema bélico también está presente en la exposición con motivo del 40 cumpleaños del Musée Marc Chagall en Niza. Bajo el título Marc Chagall, de una guerra a otra, pueden verse allí hasta el 20 de mayo unos 60 lienzos, dibujos, gouaches y collages. Cuando el museo fue inaugurado, en 1973, el propio artista decidió sobre la distribución de los cuadros.
Pero, además, la pinacoteca organizará una segunda muestra, puntual para las vacaciones de verano, centrada en uno de sus temas favoritos: el autorretrato. Así, en torno a 100 obras podrán verse a partir del 15 de junio en la exhibición titulada Marc Chagall ante el espejo, entre ellas algunas que, hasta ahora, nunca habían sido mostradas en público.
