El presidente de Francia, François Hollande, anunció el envío “en las próximas horas” de armamento a las fuerzas del Kurdistán iraquí (peshmerga) en respuesta a las “necesidades urgentes” expresadas por las autoridades de la región semiautónoma para combatir a Estado Islámico, según un comunicado del Elíseo.
Hollande defendió la necesidad de aumentar la “movilización” internacional en vista de la “situación catastrófica” a la que se enfrenta la población civil del Kurdistán. Francia aspira a jugar un “papel activo” en colaboración con sus aliados y “con las nuevas autoridades iraquíes”, personificadas en el recién designado primer ministro, Haidar al Abadi.
A la entrega de ayuda humanitaria emprendida en los últimos días se sumará ahora una nueva iniciativa para “apoyar la capacidad operativa” de las fuerzas que combaten contra los yihadistas de Estado Islámico.
“Con el objetivo de responder a las necesidades urgentes expresadas por las autoridades regionales del Kurdistán, el jefe de Estado ha decidido, previo acuerdo con Bagdad, enviar armas en las próximas horas”, explicó desde el Elíseo.
Francia se implica así en la lucha armada contra Estado Islámico, tal como ya ha hecho Estados Unidos, que la semana pasada comenzó a bombardear posiciones del grupo extremista suní en la zona norte de Irak.
Más efectivos
Por su parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Chuck Hagel, anunció que Washington había enviado a otros 130 militares a Irak, en el marco de los intentos del Gobierno estadounidense de ayudar a Bagdad en sus combates con el grupo extremista suní Estado Islámico.
Hagel, que dio una conferencia ante las tropas estacionadas en Camp Pendelton, base de los Marines ubicada en California, detalló que los militares ya habían llegado a un área ubicada en los alrededores de Erbil, capital de la región semiautónoma del Kurdistán.
“No se trata de botas sobre el terreno para operaciones de combate”, detalló Hagel, según recogió la cadena de televisión británica BBC.
Fuentes del Departamento de Defensa afirmaron que este equipo “analizará la situación humanitaria y desarrollará opciones de ayuda más allá de las actuales operaciones de entrega (de ayuda) por vía aérea para apoyar a los civiles desplazados atrapados en la montaña de Sinyar”.
Ayuda
Los gobiernos de Estados Unidos y Reino Unido entregaron ayuda humanitaria por vía aérea en los últimos días, lo que se ha unido a los bombardeos ejecutados por Washington contra las posiciones del grupo extremista suní Estado Islámico -antiguo Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS)-, en su primera acción militar en el país desde la retirada de sus tropas en 2011.
Los yazidíes huyeron la semana pasada de Sinyar tras la captura de la ciudad por parte de la formación ‘yihadista’, que les considera infieles -su fe tiene vínculos con el zoroastrismo- y procedió a destruir sus lugares sagrados y ejecutar a decenas de personas.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) detalló que 31.000 iraquíes, la mayoría residentes en Sinyar, habían llegado al Kurdistán en los últimos días.
El ISIS proclamó a finales de junio el Califato Islámico y nombró califa a su líder, Abú Bakr al Baghdadi. La nueva organización se declara Estado independiente y reclama que todos los musulmanes del mundo le juren fidelidad.