El Ministerio de Fomento ha incluido una docena de estaciones de ferrocarril de Castilla y León dentro dentro su catálogo de escenarios para rodajes de películas, anuncios y series de televisión, sesiones fotográficas o eventos de todo tipo. Esta iniciativa, que pretende poner en valor el patrimonio ligado al tren, ha seleccionado las nuevas terminales de Burgos, León, Salamanca y Segovia por su diseño vanguardista, así como otras ocho clásicas, siete de ellas con actividad.
Adif ha lanzado una amplia oferta de alquiler con un centenar de estaciones, inmuebles singulares y centros logísticos de toda España a precios que oscilan desde 200 euros la hora hasta 5.850 euros por una jornada completa en función de la ubicación. En total, son 112 espacios seleccionados, entre los que se encuentran las situadas en las capitales de provincia de Castilla y León, Miranda de Ebro y Puebla de Sanabria.
Asimismo, la sociedad facilita desde hace años sus espacios ferroviarios como platós de rodaje, si bien a partir de ahora quiere organizar y potenciar esta actividad. Para ello, ha diseñado una nueva herramienta virtual en su web que facilita la localización de espacios en función de su situación geográfica y tipología. Esta iniciativa se enmarca, según la compañía, en su plan de racionalización de activos, con el que busca mejorar su eficiencia, generar ingresos adicionales y recortar costes.
A pesar de que la crisis económica ha frenado el desarrollo de la alta velocidad y los planes de integración del ferrocarril en las ciudades, Castilla y León cuenta ya con cuatro nuevas estaciones. De la terminal Burgos Rosa de Lima, inaugurada en 2008, Adif destaca su “moderno” diseño, así como sus amplios ventanales que “llenan el espacio de luz”, mientras que de la estación provisional de León subraya su “funcionalidad”.
La compañía ferroviaria pública señala que la “moderna” estación de Salamanca se encuentra ubicada en las “afueras” de la ciudad y que dispone de un centro comercial. De la terminal Segovia Guiomar, abierta en 2007, indica que tiene una arquitectura “tipo puente” sobre las vías de alta velocidad Madrid-Valladolid.
La sociedad considera que el ferrocarril es parte de la historia, y que por lo tanto, ilustra a la “perfección secuencias vividas en el siglo pasado”. De Castilla y León ha elegido ocho estaciones como la de Ávila, de “tamaño medio” y con “poca actividad”, lo que facilita, según Adif, las producción audiovisual. También alquila la antigua terminal de la capital leonesa, que se cerró en 2011 por la supresión del paso a nivel de El Crucero, por lo que para la entidad pública es “perfecta” para rodar una secuencia durante “mucho tiempo”.
Respecto a la estación de Palencia, la sociedad destaca su “clasicismo francés” y estructura “simétrica en forma de U”, así como el estilo victoriano de la de Miranda de Ebro, una de las pocas de este tipo de España. De Valladolid Campo Grande, valora su gran actividad ferroviaria, mientras que de la terminal soriana, la disponibilidad de muelles y almacenes en “desuso”.
