Los datos no figuran en ninguna comunicación oficial de la Fiscalía, pero crecen las teorías sobre una posible conspiración contra el ex director gerente del FMI Dominique Strauss-Kahn. Después de que un 49 por ciento de los ciudadanos franceses apoyaran el regreso del economista galo a la política, la prensa neoyorquina sigue haciéndose eco de que la Fiscalía podría acordar retirar en la siguiente vista a los tribunales los cargos contra de agresión sexual e intento de violación que pesan sobre Strauss-Kahn, según publicó ayer el diario New York Post.
«La credibilidad (de la demandante) está en tan malas condiciones ahora mismo, que sabemos que no podemos mantener un caso con ella», aseguró al rotativo una fuente anónima a la que se identifica como un «alto cargo de la investigación». El proceso será desestimado «con certeza» el próximo 18 de julio, cuando está prevista la nueva comparecencia del político y economista francés ante el juez federal Michael Obus, o incluso antes de esa vista.
«Nadie va a creer nada de lo que salga de su boca, lo cual es una pena, porque ahora puede que nunca sepamos lo que realmente pasó en esa habitación de hotel», detalla esa fuente sobre el supuesto asalto por el que fue acusado el mes pasado Strauss-Kahn por una mujer de Guinea, que trabajaba en el establecimiento Sofitel de Manhattan (Nueva York). La veracidad de la supuesta víctima se ha ido minando en los últimos días después de que la propia Fiscalía ofreciera detalles el viernes pasado de las «mentiras» e «inconsistencias» en las que incurrió, lo que llevó al juez instructor a poner fin al arresto domiciliario en el que se encontraba DSK, como es conocido por la prensa el exdirector gerente del FMI. El pasado fin de semana continuaron los rumores que desacreditan a la mujer africana, quien según el New York Post «hacía labores dobles como prostituta, cobrando en efectivo por sus servicios a los huéspedes masculinos» del alojamiento.
Por su parte, el periódico afirmó que «28 horas después de que la camarera dijera que había sufrido abusos de DSK, habló por teléfono con un amigo de una cárcel» de Arizona. «Los investigadores se enteraron de que la llamada se grabó y obtuvieron una traducción de la conversación en la que se oía: No te preocupes, este tipo tiene mucho dinero. Sé lo que hago». Pero las acusaciones contra DSK continúan.
