Bajo el lema ‘Luchamos contra la pobreza, ¿te apuntas?’, la ONG para el desarrollo Manos Unidas ha vuelto a poner en marcha la LVI campaña contra el hambre que hace varias semanas se encargaba de presentar la parroquia local. Con el objetivo de comprar un molino y construir un almacén en una escuela Primaria de Deressia, en el país africano de Chad, las diferentes actividades solidarias han copado la agenda de los cuellaranos estos días. No obstante, el festival de Manos Unidas, que celebró su cuarta edición, fue el plato fuerte de todo lo organizado. Un total de 15 grupos de Cuéllar, Remondo y Chañe, demostraron su buen hacer en la música, la danza, la interpretación, la percusión, el canto, etc. Además, los grupos participantes están compuestos por miembros de todas las edades, lo que dotó al certamen de una pluralidad necesaria para mostrar que no hay edad a la hora de ser solidarios.
En la edición anterior el público llenó las gradas del pabellón polideportivo municipal ‘Santa Clara’, y en esta ocasión no fue menos. A falta de concretar cifras, los primeros datos revelan que la cuantía recaudada asciende a más de 7.500 euros. Los cuellaranos demostraron que ante la pobreza su solidaridad no encuentra límites, y además de ayudar pudieron disfrutar de un entretenido y espectáculo y rifas de regalos donados. Los asistentes mostraron su satisfacción ante el hecho de haber contribuido una vez más a la causa. Además, como se ha hecho este año, un delegado de Manos Unidas explicará en unos meses cómo se ha desarrollado finalmente el proyecto planteado gracias a las aportaciones de todos. Así, los colaboradores pueden comprobar con testimonios reales en qué se ha invertido su dinero. Rifas, exposiciones fotógraficas, talleres y cuentacuentos, han sido otras de las actividades programadas que han recibido el apoyo de los vecinos de Cuéllar.
El proyecto de este año tiene un coste de 19.559 euros y unos 300 beneficiarios directos; los indirectos ascienden a 2.150. Con unos magníficos resultados en la campaña de 2014 (21.727,41 euros) las expectativas de sobrepasar la cantidad necesaria se mantienen dados los resultados.
Otro de los puntos clave de esta LVI campaña es el rastrillo solidario; tras una recogida de objetos de todo tipo, estos se expondrán y venderán en un local de la calle San Francisco, punto habitual de otras ediciones.
Del 27 de febrero al 8 de marzo se abrirá al público y todo lo recaudado se sumará a lo obtenido en el festival y el resto de actividades mencionadas de la organización no gubernamental.
