El segundo Congreso Internacional sobre Teoría de la Valoración, una herramienta de las matemáticas, dio comienzo ayer en el Palacio de la Mansilla, una de las sedes de la Universidad de Valladolid en Segovia. Participan en su organización el grupo de investigación SINGACOM, de la UVA, y el departamento de Álgebra de la Universidad Complutense de Madrid.
Según Santiago Encinas, responsable de la organización por parte de la UVA, a pesar de que los expertos en una cuestión tan especializada estén en contacto a través de Internet o de publicaciones sobre el tema, “vernos en persona hace que surjan las ideas más facilmente”.
Durante esta semana, el congreso se está desarrollando en el Palacio de Mansilla, sede del vicerrectorado de la UVA, donde se imparten diferentes cursos especializados, aunque también algunas conferencias de últimos resultados. La semana que viene proseguirá en El Escorial, en las instalaciones de la Universidad Complutense, y se analizarán los últimos avances en teoría de valoraciones. El día del traslado, sábado 23, los participantes aprovecharán el viaje para hacer una parada de visita turística en La Granja de San Ildefonso.
El primer congreso sobre teoría de valoraciones tuvo lugar en Canadá en 1999. Ayer intervino uno de los participantes en esa edición original, Franz Viktor Kuhlmann, de la Universidad de Saskatchewan en Canadá, importante experto en el tema y promotor tanto del primer congreso como de éste.
Los destinatarios del congreso son los principales estudiosos del mundo de la teoría de valoraciones. A pesar de tratarse de una serie de conferencias acerca de un campo tan específico de las matemáticas, participan en las actividades cerca de cien expertos de muy variadas procedencias: Francia, Estados Unidos, Alemania, Rusia, Bélgica, India, Italia, Israel o Reino Unido.
Las valoraciones son una herramienta utilizada en el campo de la geometría algebraica. Simplificando mucho, sirven para analizar el comportamiento de los polinomios. Recientemente se ha descubierto que las valoraciones pueden ser utilizadas en campos de las matemáticas aparentemente lejanos, como las trayectorias de los campos de vectores tridimensionales. Esto supone que aunque las validaciones sean, en principio, una herramienta de la matemática pura, pueden terminar teniendo incidencia en un campo que está muy relacionado, por poner un ejemplo, con las predicciones meteorológicas.
