La capacidad para adaptarse a las diferentes variantes que ofrece el juego marcan las diferencias. Ver virtudes ante los problemas confiere empaque y envergadura a los grandes estrategas. La Gimnástica Segoviana, sumida en un caudal a contracorriente de exceso de confianza defensiva al encontrarse a un Atlético Astorga en inferioridad y un marcador adverso (0-1), tiró de la apuesta ofensiva del alquimista Manuel González, con la inclusión de hasta siete atacantes, y del liderazgo del capitán Anel, que ofreció la enésima lección de gestión de tiempos a sus 39 primaveras. Un gol del máximo artillero del Grupo VIII de la Tercera División, Roberto Puente hizo que el técnico del conjunto azulgrana arriesgara con todo, pues la opción de perder contra diez, aún enfrentándose a un digno rival, no era sostenible. El efecto surtió de forma inmediata y Anel, a la salida de un córner, y Kike, con una perfecta definición, consiguieron revertir la situación (2-1) en apenas tres minutos para pasar a la liderar la competición, tras la derrota de la Arandina frente al Zamora (1-0). Con el resultado de cara, el cuadro gimnástico quiso agravar la ventaja y, en vez de retornar a la línea defensiva de cuatro, fue a marcar cuatro goles. En definitiva, el éxito es para los valientes.
González abrió fuego con Facundo bajo palos y una primera línea compuesta por Javi Marcos y Anel en la pareja de centrales y Rubén y Charly -de nuevo tomando la posición el lesionado Adrián Pérez- en los laterales. El encargado de sujetar y dar equilibrio al esquema gimnástico fue, como acostumbra, Manu; en un medio del campo completado con la casta de Domingo y la ambición de Álex Conde, que regresó al once tras ser baja la pasada jornada. En la parcela ofensiva volvió Mika a tomar la referencia del ‘9’, al ser ausencia Ivi por un proceso gripal, y Dani arribas y Calleja encarnaron los extremos.
En el bando contrario, Miguel Ángel Miñambres saltó al terreno de La Albuera con el guardameta Juan Berlina; los defensas Emilio, Isma, Jesusi y Víctor; los centrocampistas Gonzalo, Jorge y José Manuel; y los delanteros Diego, Javi Amor y el contrastado ariete Puente, que acumula ya nueve dianas con la de hoy. El equipo maragato salió despejado de ideas con la máxima de dotar de efectividad sus rápidas acciones en ataque. El tridente ofensivo liderado por Puente fue la punta del iceberg de la vertiente del conjunto verde, causando incomodidad a los locales. El particular duelo Anel-Puente se dirimió a espadas como un ejemplo a tomar paralas nuevas generaciones de lo que es el compromiso y la profesionalidad en esta categoría.
De poder a poder
Entre líneas movió su juego el plantel visitante, aprovechando los espacios que dejó el conjunto azulgrana. Ante esta situación Domingo y Conde arroparon a Manu con el objetivo de que la Gimnástica sufriera menos. Importante labor defensiva del riazano, que sirvió para sentar los cimientos del sistema local. Tras unos primeros minutos en el que el Astorga planteó un juego más compuesto y vertical, la Segoviana se sacudió la presión con una buena combinación entre Conde y Mika, que finalizó el cántabro con un potente disparo desde la frontal del área de sumo peligro, y con un cabezazo de Anel en el saque de un córner. Partido de poder a poder, en el que por determinados tramos fueron dominando uno u otro equipo. Esto puso en liza las pretensiones de los bloques por manejar el esférico y comandar la competición.
Giro inesperado
Javi Amor dispuso de una clara ocasión para los visitantes, pero el buen hacer de Anel como único zaguero y la disposición de Facundo noquearon la propuesta maragata. Estaba el encuentro abierto en canal, de tú a tú en clave mayor. Sin embargo, el enfrentamiento sufrió un giro inesperado cuando se había consumido la primera media hora de juego al resultar expulsado el capitán del Astorga, Diego, tras ver dos cartulinas amarillas. Ante esta situación, Miñambres movió ficha tras el ecuador para reorganizar su estructura e introdujo a Tarabilla por Jorge.
En el segundo tiempo, la batuta de mando fue exclusiva de la Gimnástica y se personó con asiduidad en los dominios de Berlina. La más clara la tuvo Mika a la salida de un saque de esquina sacado por Calleja, que a punto estuvo de ser juez para inaugurar el electrónico. El Astorga, por su parte, buscó fertilidad en sus escasas oportunidades de ataque, pero a plena confianza en los movimientos de Amor y Puente. Aprovechó la relajación defensiva de los segovianos y de la habilidad de Puente sacó un penalti, cometido por Marcos, para revertir la situación de su plantilla. Gol ajustado del propio 9 visitante para empezar a manejar los tiempos con el fin de echar el ancla en el 0-1.
La apuesta
El tejido del cuadro atlético tomó solidez, con las líneas muy replegadas y apuntaladas, y González derrochó valentía al sacar a Kike, Dani Abad y Diego Gómez por Arribas, Rubén y Manu. Con todo salió una nueva Segoviana y para intentar dar un golpe de autoridad. El cauce ofensivo corrió a cargo Conde, Calleja, Kike, Abad, Domingo y arriba dos delanteros puros como Mika y Gómez. Sin embargo, tuvo que ser Anel, patrimonio del club, en su enésimo ejemplo de gallardía, el que igualó la contienda a la salida de un córner. El impulso del capitán contagió a todos los compañeros y, apenas dos minutos después, Gómez y Mika fabricaron una jugada para que Kike, de un latigazo, materializara el 2-1 y obrara la remontada. Este gol llevó el partido donde quería el conjunto azulgrana, aunque el Astorga no tenía nada que perder.
Quedaba un cuarto de hora y la intensidad, a pesar de los calambres físicos que acecharon a los futbolistas, siguió permutando en el choque. Fue un final tributo al aficionado al fútbol, con todavía cosas por contar. Los minutos que recibió Gómez fueron aprovechados al máximo y consiguió provocar un penalti. Calleja se erigió como lanzador, aunque el disparo se marchó por encima de la madera. No redujo su ahínco el equipo local y, en vez de guardar el balón, siguieron atacando como si fuera por debajo en el marcador. El Astorga también lanzó su última bala y Alberto ajustó un envenenado disparo al palo derecho. Finalmente el 2-1 fue el resultado que imperó al término del tiempo añadido y los tres puntos se quedaron en La Albuera para que la Gimnástica pasara a liderar el Grupo VIII.
