Durante las fechas navideñas se ha ido extendiendo en los últimos años el uso de artefactos pirotécnicos para momentos como el fin de año, o en la Cabalgata de Reyes.
Por ello, desde la asociación Autismo Segovia consideran que en ciertos momentos y algunos sitios es “desmesurado” el uso de de petardos, cohetes y fuegos artificiales.
Por eso, bajo el lema ‘Lo que a ti te divierte, a mi me aterra’, la asociación segoviana ha impulsado una campaña para intentar concienciar de lo nocivo que es, para las personas con TEA (trastorno del Espectro del Autismo), está práctica tan habitual en los últimos años, y que condicionan su participación social en igualdad de condiciones.
La hipersensibilidad auditiva es una alteración del procesamiento sensorial. “En el caso de la hiperacusia nos estamos refiriendo a que los ruidos son percibidos con mayor intensidad”, explica Susana Guri, presidenta de la asociación. “Temple Grandin (mujer con Autismo e hipersensibilidad auditiva) lo describe como si tuviera ‘un amplificador de sonido con el volumen al máximo”.
Las personas que padecen está condición el ruido puede provocarles dolor y llegar a ser insoportable; intentan evitar lugares donde hay mucha gente, o ambientes en donde se sabe que va a haber mucho ruido, lo cual hace que su participación en la sociedad o en actividades de ocio se vea reducida y afectada, con todo lo que conlleva.
Además, es importante destacar la hiperacusia no se da solo en el autismo, se puede dar también de forma aislada en cualquier persona. En el caso de las cabalgatas, resulta en parte traumático que un niño no pueda disfrutar de estos momentos por culpa de los cohetes que se lanzan y que provocan un gran estruendo.
Regular el uso de material pirotécnico por parte de los ciudadanos, o limitar los decibelios de los fuegos artificiales, permitiría un mayor disfrute por parte de todas las personas.
