El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, mantendrán sendos encuentros hoy en Bruselas con el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, para discutir la reciente escalada de violencia en el este de Ucrania y la aplicación de los acuerdos de Minsk.
“La Comisión está preocupada por la aplicación de los acuerdos de Minsk”, reconoció en rueda de prensa el comisario de Agricultura, Phil Hogan. El jefe del Ejecutivo comunitario recibirá “información de primera mano” de la situación del presidente ucraniano, explicó el comisario irlandés, que aseguró que “la Comisión está en contacto regular con las autoridades rusas sobre estas cuestiones”.
Poroshenko se reunirá primero con Juncker y posteriormente mantendrá un almuerzo de trabajo con Tusk, que siempre se mostró partidario de la línea dura y mantener las sanciones económicas de la Unión Europea a Rusia, que fueron extendidas hasta finales de enero para dar tiempo al cumplimiento de Minsk aunque algunas ya entraron en funcionamiento en ambas partes del conflicto.
La canciller alemana, Angela Merkel, defendió el pasado lunes, cuando recibió a Poroshenko en Berlín junto al presidente francés, François Hollande, “hacer todo lo posible” para que se aplique en su totalidad el acuerdo alcanzado en febrero en Minsk y que incluye un alto el fuego parcial entre Ucrania y las milicias separatistas de Donetsk y Lugansk, en el este del país y desde hace tiempo independientes políticamente de Kiev y en lucha constante con las tropas leales al Gobierno ucraniano.
“Estamos aquí para aplicar el acuerdo de Minsk, no para cuestionarlo”, subrayó la canciller alemana, que insistió en la necesidad en “respetar” lo acordado en Minsk. Más de 6.500 personas murieron en el este de Ucrania desde que estalló el conflicto, en abril de 2014. Los ataques se redujerondesde el acuerdo alcanzado entre las partes el pasado mes de febrero en Minsk, pero tanto Kiev como los separatistas se acusan mutuamente de incumplirlo y en las últimas fechas se volvieron a producir combates entre las partes del conflicto en las zonas en liza.
