La Unión Europea afirmó ayer que la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela y sus primeras acciones, incluyendo el cese de la fiscal general del país, Luisa Ortega, han “debilitado aún más” las perspectivas para una “vuelta pacífica” al orden democrático y han incrementado la polarización de “una sociedad ya dividida”.
En un comunicado, el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) de la UE reiteró que “no existe alternativa al respeto de las instituciones legítimas, la separación de poderes y el respeto del derecho de los ciudadanos a expresar libremente su opinión política”.