Estados Unidos y Rusia, en su capacidad de copresidentes del Grupo Internacional de Apoyo a Siria (ISSG, por sus siglas en inglés) anunciaron ayer los términos del alto el fuego propuesto al régimen de Bashar al Assad y a las fuerzas opositoras para que lo ratifiquen y pueda entrar en vigor a las 0:00 horas del 27 de febrero. Entre otras cosas, el acuerdo prevé la suspensión de los bombardeos aéreos por parte del Gobierno sirio como de la aviación rusa que le apoya contra “los grupos de oposición armados” además de pedir a ambos bandos que se permita la entrada de ayuda humanitaria en las zonas bajo su control territorial.
“El cese de hostilidades a nivel nacional se aplicará a cualquier parte actualmente implicada en las hostilidades militares o paramilitares contra cualquier parte que no sean Estado Islámico, el Frente al Nusra o cualquier otra organización considerada como terrorista por el Consejo de Seguridad de la ONU”, reza el documento con los términos publicado por Estados Unidos y Rusia. En este sentido, se invita tanto a los grupos de oposición a Al Assad como a al Gobierno sirio a que hagan saber antes de las 12:00 horas del viernes 26 de febrero “su compromiso y aceptación de los términos” contemplados para cada una de las partes.
Además, los firmantes de la tregua se comprometieron a “trabajar por la liberación temprana de detenidos, especialmente mujeres y niños”, rezaba el texto.
En el caso de la oposición, se le pidió que cese todo tipo de ataques contra las fuerzas gubernamentales y quienes les apoyan, permitiéndose solo un “uso proporcionado” en caso de autodefensa y que no busquen apoderarse de territorio aprovechando el alto el fuego.