La selección española de baloncesto dio ayer un nuevo paso en su preparación hacia el Mundobasket de Turquía al derrotar cómodamente (94-75) a Lituania en el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid, correspondiente al Torneo Internacional de Madrid, y que sirvió de antesala para el plato fuerte de mañana ante Estados Unidos.
Asimismo, la presencia de los bálticos en el mismo grupo que el combinado de Scariolo en el Mundial sirvió para evaluar el estado actual de los españoles, que con continúan imbatidos esta pretemporada.
Por ello, y ante la atenta mirada de miembros del ‘staff’ del ‘Dream Team’ entre el público, los locales arrancaron algo distraídos y pausados, buscando el juego interior de un activo Marc Gasol. Pese a esto, el leve momento de esplendor del ‘raptor’ Linus Kleiza (19 puntos) situó a los visitantes por delante (22-17) con una imagen bien distinta a la ofrecida en el precedente de Vitoria.
No obstante, la capacidad de la estrella lituana para descarrilar en cuanto se tensa la cuerda le llevó al banco tras cometer su segunda falta personal, lo que despertó a España de su vigilia. Así, y con la entrada de las primera rotaciones se incrementó la intensidad defensiva, propiciando un parcial de 9-0 que catapultó a la ‘Roja’ hacia su máxima ventaja (24-19).
El segundo parcial desajustó el engranaje de los vigentes campeones mundiales y continentales. Con el regreso de la versión amable de Kleiza, y con Javtokas, flamante fichaje del Power Electronics Valencia, cerrando el rebote ofensivo, el combinado de Kestutis Kemzura vivió su mejor momento sobre el parqué (28-33).
Sin embargo, la experiencia de los nacionales y su amplitud de banquillo reinstauró el dominio local por medio de Juan Carlos Navarro. El capitán, que acumula 10 años como internacional absoluto, llevó la llave de la remontada con dos triples consecutivos lo que, unido al de un sorprendente Felipe Reyes, elevó la renta a sus máximos guarismos (49-41) al descanso.
Tras el regreso de la bocana de vestuarios, y con los quintetos iniciales sobre la pista, España dejó zanjado el duelo. Con Marc Gasol (18 puntos) -ya recuperado- ejerciendo de dueño y señor de la pintura, y con la línea exterior en estado de gracia, los subcampeones olímpicos pusieron tierra de por medio de forma insalvable.
Y es que una de las ventajas de esta plantilla es que todos cuentan. Con todos los jugadores aportando en la faceta ofensiva, y dando descanso a los teóricos titulares, la ‘Roja’ afrontó los últimos compases con los deberes hechos tras dominar por más de 20 puntos de diferencia (76-56).
Mañana viene ‘la’ prueba de este período de preparación. Durant y sus chicos quieren guerra.
