El abogado y sacerdote Ernesto Juliá recoge en el libro ‘Instantáneas de un cambio’ una semblanza del que fue prelado del Opus Dei entre 1994 y 2016, Javier Echevarría, que asumió el cargo a la muerte de Álvaro del Portillo con el reto de ser “fiel al espíritu del fundador” en las circunstancias de ese momento.
“¿Tenía el Opus Dei hombres capaces de llevar adelante esa tarea, encargada por Dios a Josemaría Escrivá? ¿Qué disposiciones de espíritu, y qué cualidades humanas se requerían para abordarla? ¿Cambiaría algo en esa nueva etapa?”, son algunas de las preguntas que se plantean en la obra.
El libro se presentó esta semana en la Librería Neblí de Madrid. En el acto intervendrán el autor, Ernesto Juliá, y el periodista y escritor Salvador Bernal.
Javier Echevarría recibió el encargo de suceder a Álvaro del Portillo al frente de la Prelatura y la misión de sacar adelante la labor del Opus Dios en la Iglesia y en un buen número de países de los cinco continentes.
El deseo del autor es ofrecer en este libro una semblanza de su figura, que plasme lo que denomina “su conversión en padre”. Sin dar una respuesta “exhaustiva” a las preguntas que se plantean, estas páginas invitan a conocer al prelado a modo de “instantáneas”.
Según explica el autor en la introducción del libro, durante sus años como prelado, entre 1994 y 2016, coincidiendo con los pontificados de Juan Pablo II, Benedicto VI y Francisco, Echevarría tuvo que afrontar un tiempo marcado por distintos acontecimientos como las guerras en el Medio Oriente, en el Norte de África, en los Balcanes o el establecimiento del daesh.
Además, precisa que tuvo que enfrentarse como prelado a “la gran crisis de fe en el mundo occidental, con diferentes connotaciones” en diferentes lugares, con una “notable reducción de las vocaciones sacerdotales”.
“¿Cómo actuó Javier Echevarría en estas circunstancias históricas para defender con eficacia el carisma del Opus Dei, seguir desarrollando la labor y pidiendo la colaboración de sus hijos en el Opus Dei para comenzarla en lugares como Lituania, Estonia, Eslovaquia, Líbano, Panamá o Uganda?”, plantea Juliá.
Amor y libertad
A esta pregunta responde a lo largo de siete capítulos: ‘Los primeros pasos’; ‘Con Josemaría Escrivá. 1955-1975’; ‘Al lado de Álvaro del Portillo. 1975-1994’; ‘Prelado del Opus Dei. 1994-2016’; ‘Viajes, encuentros y reuniones’; ‘En su misión de gobierno’; y ‘En su muerte’.
“Podemos decir que a lo largo de sus años de prelado, su misión ha sido movida por esas dos fuerzas, esas dos pasiones: amor y libertad”, subrayó el autor, en referencia a esas dos “fuerzas” que Álvaro del Portillo, su predecesor, escribió en la presentación de ‘Amigos de Dios’, libro póstumo que recoge homilías de San Josemaría Escrivá.
“Su modo de obrar —añadió— para dirigir e impulsar el apostolado de la Obra es evidentemente fruto de cuanto ha acogido de Escrivá y de Del Portillo. Sus años de gobierno expresan una auténtica continuidad de cuanto el Señor había inspirado al fundador del Opus Dei”.
