El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, defendió ayer la investigación penal abierta contra los dirigentes del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), prokurdo, que han defendido el “autogobierno” de la región turca de mayoría kurda del sureste del país. “Las declaraciones de los dirigentes del HDP suponen un delito constitucional. Los fiscales les han abierto una investigación. Deben seguir con ello”, afirmó Erdogan. “Creo que el proceso comenzará con la retirada de la inmunidad y tendrá un impacto positivo en el clima de nuestro país en la lucha contra el terrorismo”, añadió.
Los dirigentes del HDP son diputados en el Parlamento turco, por lo que cuentan con inmunidad. Sin embargo, pueden ser procesados y condenados a una pena que cumplirían una vez se les termine el mandato y la inmunidad asociada. En ese sentido, ayer, medios kurdos denunciaron la ofensiva militar turca sobre varios distritos kurdos, como Silopi, en la provincia de Sirnak, donde habrían muerto dos personas. Allí, las fuerzas turcas están empleando fuego de carros de combate y varias personas fueron detenidas.
Asimismo, un hombre murió por los disparos de la Policía cuando los agentes irrumpieron en su casa. La esposa del hombre resultó herida de gravedad. Además, una mujer de 35 años murió también en Silopi por el impacto de un proyectil
