Escarabajosa de Cabezas acogió un emotivo y caluroso memorial en recuerdo del joven Fernando Arandilla Martín, una persona muy vinculada al pueblo que hacía lo que más le gustaba: era agricultor, ganadero, galguero, amante de los caballos… En el memorial que lleva su nombre se hizo lo que más le gustaba, carreras de galgos, como reconocimiento a su labor para que se celebraran. Personas de los pueblos mas cercanos a Escarabajosa, como Cantimpalos, Carbonero, Mozoncillo, Fuentepelayo y Escalona del Prado, así como de Zamora, Ávila y Salamanca, participaron en las diferentes carreras de galgos.
Para sorpresa de todos, la última carrera fue para tres galgos de Fernando, lo que emocionó a todos. Todos sus amigos agradecieron haber formado parte de su vida. Para finalizar el acto se entregaron unas placas conmemorativas y una foto a todos sus familiares. Según palabras de su hermana Elena, la foto representa lo que era su hermano, “un gran trabajador y una gran persona”. También agradeció las muestras de cariño que recibieron, en especial de todas las personas de Escarabajosa de Cabezas un pueblo pequeño “pero con un gran corazón”.
