BRIEVA
Brieva se asienta en una llanura con ligeros alcores que rompen la línea horizontal infinita a nuestra visón. Se ubica entre las poblaciones de: Adrada de Pirón al norte, La Higuera de la Veguilla al suroeste y Basardilla al sureste, a escasos 14 km al noreste de la capital provincial.
Actualmente está habitada por unas 85 personas, cuyo gentilicio es brievanos. Históricamente los moradores de esta puebla han venido dedicándose a la actividad agropecuaria, agricultura de secano, lino, legumbres, viñedos, huerta y ganadería de trabajo, despensa y actividad laboral, pues su término municipal linda con la Cañada Real Soriana Occidental, conocida en estas latitudes como Cañada de la Vereda de la Sierra, y parte de su población masculina se empleaba en los diferentes trabajos que ofertaba la cabaña trashumante; también se elabora artesanía de cerámica y textiles.

En la actualidad se está diversificando la actividad económica de la puebla, pues a las actividades históricas, se está sumando el turismo rural, el senderismo, escalada y la gastronomía, con degustación de delicias locales como son: el potaje de garbanzos; el asado de cordero, el chorizo casero, los pimientos asados, como platos fuertes, además el queso de oveja artesanal y la tarta de queso ideal para cerrar una comida, todo ello regado con vino de la región
El nombre de la puebla “Brieva” algunos dicen que posiblemente venga del idioma celta, briva, puente, otros que seguramente proceda del latín bravía, vados, y unos terceros que procede del latín vires, que significa espino, abrojo, zarza.
Tras la creación de la institución de La Comunidad de Villa y Tierra, Brieva pasó a integrarse, como su cabeza, en el sexmo de San Lorenzo, de la Comunidad de Ciudad y Tierra de Segovia.

Patrimonio histórico artístico. Iglesia parroquial de Santiago Apóstol de fábrica románica con torreón campanario. Alberga en su interior un notable retablo mayor y un órgano del siglo XIX; la ermita de San Bartolomé del siglo XVIII y la ermita de las Cinco Llagas o de la Veracruz, junto al cementerio municipal, en cuanto a construcciones religiosas. El crucero de piedra en la Plaza Mayor, la antigua fragua, el potro de herrar y la casa azul que fue de Lucía Bosé.


BASARDILLA
Basardilla se asienta entre alcores, hondonadas y las cuencas de los ríos Pirón y Polendos en las estribaciones de la cara norte de la sierra de Guadarrama, muy próxima al Puerto de Malangosto, importante vial que comunica nuestra puebla con las localidades de Rascafría y Valle del Lozoya, en la cara sur de la Sierra de Guadarrama; uno de los caminos más transitados entre las dos Castillas durante la Edad Media.


En 1272, la Corona, en aquellos momentos sobre las sienes de Alfonso X, concedía exenciones tributarias a quienes morasen en las albergueras y puertos de Valathome, Fuenfría, Mançanars y Malagosto. Además de esta vía sobre la sierra, por el término municipal de Basardilla pasa la Cañada Real Soriana Occidental, conocida en estas latitudes como Cañada de la Vereda de la Sierra, el camino de San Frutos y las carreteras N-110, la SG-P-2222 y la SG-V-2362.
La puebla de Basardilla se ubica entre las poblaciones de: Brieva al noroeste, Santo Domingo de Pirón al noreste, La Higuera al oeste y Torrecaballeros al sur, a escasos 12 km al noreste de la capital provincial. Actualmente está poblada por unos 135 moradores. Históricamente los habitantes de esta puebla han venido dedicándose a la actividad agropecuaria como forma de ganarse la vida, esto es, agricultura de secano, con especial incidencia en cultivo del lino, huerta y ganadería de trabajo, fuerza motriz para las labores agrícolas y necesidades de transporte, y despensa.

El nombre de Basardilla, dicen que comenzó en el siglo XIII como Var Sarrilla, que viene a significar valle cubierto de zarzas.
Esta latitudes fueron reconquistadas de manos mahometanas sobre el año 1088 por mandato de Alfonso VI de León, y la dirección de su paladín y luego yerno, don Raimundo de Borgoña, quien también dirigió la repoblación con gentes cristianas del norte peninsular y la construcción de edificios con simbología religiosa, como iglesias, ermitas, conventos, etc. que consolidaban los nuevos asentamientos poblacionales como unidad cristiana frente al Islam.
El término municipal de Basardilla esta humedecido por las corrientes de agua de los arroyos de: Agustinos, de Peña del Gato, de las Corzas, del Pastizal, del Valle y del río Pirón, donde todos vierten sus aguas que hoy terminan en el Embalse de Pirón. Estas corrientes fluviales fueron muy importantes en el desarrollo agrícola de Basardilla a lo largo de la historia.

A partir de la segunda mitad del siglo XX, la puebla de Basardilla experimentó la misma resaca de emigración poblacional hacia las ciudades buscando mejor calidad de vida, que la inmensa mayoría de las poblaciones rurales de toda Castilla. Hoy, una vez más, Basardilla sigue la tónica dominante de los pueblos de su entorno buscando nuevas formas de mantener una economía local atrayente para la juventud, a través de nuevas iniciativas como son: el turismo con alojamientos rurales, el senderismo, la gastronomía, etc.

Patrimonio histórico artístico. Iglesia parroquial de San Bartolomé de fábrica románica con torreón campanario que fue declarada Bien de Interés Cultural en 1994; ermita Virgen del Pedernal al pie de la sierra; el Calvario integrado 14 cruces de granito, construido entre el siglo XVII y XVIII; la fuente El Calvario; el potro de herrar; el corral del Concejo Municipal, donde se custodiaba el ganado suelto abandonado y se devolvía a los dueños que lo reclamaban tras imponerles una multa.


Celebra sus fiestas: Santa Águeda, el 5 de febrero; San Isidro, el 15 de mayo; romería de la Virgen del Pedernal, el sábado anterior al domingo de Pentecostés; San Bartolomé, el fin de semana más próximo al 24 de agosto.
—
* Juan Fco. Sanjuán Benito
www. juansanjuanbenito.es
