La localidad de Aldealengua de Santa María ha celebrado sus fiestas patronales en honor a San Roque y San Roquillo. Desde días antes, el municipio acogió la exposición ‘La belleza de las pequeñas cosas’, como preludio de los festejos. El lunes 15 de agosto se disputó el ya tradicional campeonato de bolos, y se instaló un parque infantil para los más pequeños.
Por fin el martes, festividad de San Roque, llegó el gran día. Se celebró la misa en honor a la santo, seguido del pasacalle con los dulzaineros y el baile. Los más jóvenes lucieron su traje tradicional. Y a la llegada del atardecer, Fernando de Lama, antiguo alcalde del municipio, repartió como hace cada año la tradicional limonada para todo el pueblo. El día terminó con la orquesta Odessa en la plaza consistorial.
El miércoles se despertó Aldealengua con la diana, seguida de la misa de difuntos. Por la tarde, los más pequeños tuvieron su concurso de disfraces, en el transcurso de la entrega de trofeos y rifas.
Pero el segundo día grande fue el jueves, con la procesión hasta el Soto en honor a San Roquillo, seguida de la fiesta de El Perrillo. En ella tuvo ligar la sardinada, la degustación de vino y finalmente la orquesta Cubic puso el fin de fiesta en Aldealengua de Santa María en la plaza con su música.
