El Viveros Herol Nava afrontó este sábado en el IV Memorial Santiago Manguán su cuarto y penúltimo compromiso de la pretemporada antes del arranque oficial de la competición. El equipo dirigido por Álvaro Senovilla se enfrentó en un triangular a dos rivales de gran nivel: Recoletas Atlético Valladolid y Tubos Aranda Villa de Aranda, dos equipos con los que protagonizó partidos muy igualados que dejaron numerosas lecciones de cara a la próxima temporada.
La jornada arrancó con un choque muy disputado entre Balonmano Nava y Recoletas Atlético Valladolid, que terminó con derrota mínima para los naveros por 17-18. El partido comenzó favorable para Nava, con un Patotski muy seguro bajo palos y Óscar Marugán acertado desde los siete metros, logrando una ventaja inicial de 5-2 en los primeros minutos. Además, Brais González mantuvo la renta gracias a dos acciones rápidas y efectivas. Sin embargo, el Atlético Valladolid supo aprovechar una exclusión a Bonnano y varios errores de ataque por parte de Nava para empatar el partido, anotando dos goles a portería vacía y llegando al 7-7.
A partir de ahí se vivió un intercambio constante de golpes, con ambos equipos buscando abrir brecha en el marcador.. En los minutos finales de la primera mitad, una serie de imprecisiones en ataque provocaron un parcial de 0-3 para Atlético Valladolid, que se marchó al descanso con ventaja por 9-12.
Tras la reanudación, Buda apareció para cerrar su portería, impidiendo que los pucelanos ampliaran el marcador. No obstante, el equipo navero no encontró la fluidez necesaria en ataque para reducir la diferencia y los vallisoletanos lograron aumentar la renta hasta los cuatro goles. Aún así, Edu Reig y Rui Baptista acercaron el resultado a dos tantos, pero varias pérdidas consecutivas en ataque permitieron que Atlético Valladolid mantuviera la ventaja.
A falta de cinco minutos, con el marcador 14-17, Álvaro Senovilla solicitó tiempo muerto con acierto, pues la estrategia funcionó parcialmente, ya que Rui Baptista y Joao Bandeira acercaron el marcador a 16-17.Ya en la recta final, el Balonmano Nava dispuso incluso de opciones para empatar, pero apareció Nico Giráldez en portería para mantener al Atlético Valladolid por delante y certificar su triunfo por 17-18.
En el segundo encuentro, el Viveros Herol se midió a Tubos Aranda en un partido marcado por la igualdad y la intensidad. El conjunto naveró no comenzó de la mejor manera, ya que a pesar de la buena actuación bajo palos de Patotski, el equipo navero sufrió varias ocasiones en las que el balón se estrelló contra la madera, impidiendo anotar con facilidad. Esto fue aprovechado por el equipo anfitrión para abrir una brecha importante en el marcador, logrando ponerse 9-5 en los primeros minutos de la primera mitad.
Sin embargo, el cuadro segoviano reaccionó con una defensa más intensa y un ataque más acertado, lo que unido a las paradas de Patotski, propició un parcial de 0-5 que dio la vuelta al marcador y permitió al Viveros Herol irse al descanso con ventaja. Ya en el segundo acto, la alternancia en el marcador no cesó siendo Tubos Aranda quien cogió una ligera ventaja de 15-13 que el conjunto navero contrarrestó hasta el empate definitivo gracias a los tantos de Josu desde el pivote y Buda a portería vacía (15-15).
