En su ansiado reencuentro esta vez en Primera RFEF, Gimnástica Segoviana y Zamora se anularon en un duelo que pudo caer de cualquier lado para acabar no cayendo de ninguno con un reparto de puntos que dejó a todos contentos, pero a nadie feliz. Así, segovianos y zamoranos, que se conocían ya de primera mano por mil batallas vividas en el pasado, se volvían a ver las caras en un duelo de oportunidades entre dos rivales llamados a estar en la parte baja de la tabla al que ambos llegaban con la necesidad y urgencia a partes iguales de abrazar un nuevo triunfo. El equipo de Ramsés Gil porque lo afrontaba con ganas de dar un golpe sobre la mesa en su afán por seguir alejándose del abismo del descenso y el conjunto de Juan Sabas para tratar de salir del pozo pese a su última victoria ante el Amorebieta.
Ya sobre el césped de La Albuera, entró mejor al pleito el equipo gimnástico, más valiente, más atrevido, ante un Zamora tímido que, ante la declaración de intenciones segoviana con un primer disparo mordido de Borrego que se marchó desviado de la meta de Fermín, encontró refugio por medio de varias acciones a balón parado. Sin llegar a ser dañinas para intimidar la portería de Carmona, pero sí suficientes para despojarse del arreón inicial de los de casa.
De esta manera y, pasado el primer cuarto de hora de juego, la balanza volvió a equilibrase, sin ningún equipo siendo capaz de hacerse dueño y señor de un partido en el que el temor al fallo se imponía al descaro de arriesgar. Poca fluidez en ataque, muchas imprecisiones en zonas de creación y dos áreas poco habitadas. Hasta que Tresaco hizo sonar la campana.
INTERCAMBIO DE GOLPES
Porque el Zamora, cumplida la media hora de choque, golpeó primero. En una acción de segunda jugada, el equipo de Juan Sabas aprovechó un despiste de la zaga azulgrana para que, Tresaco, tras deambular la pelota por la portería de la Segoviana, lo cazase en el segundo palo libre de marca para superar con un cabezazo a un Carmona vencido y adelantar al Zamora en La Albuera. El gol visitante dejó tocado al equipo de Ramsés Gil que, arropado por su público, trató de reponerse del mazazo, primero por medio de un disparo de Silva que encontró las manos de Fermín y, acto seguido, con un córner que no logró conectar David López.
Dos primeros avisos sin éxito que no llegaron a ser tres, porque al filo del reposo, la Segoviana, con algo de fortuna, ya sí encontró el premio a su insistencia para igualar las tablas. Una falta botada por Berlanga cambió la trayectoria de la pelota tras tocar en la barrera para engañar a Fermín y devolver las tablas al marcador en lo que era su segundo tanto con la camiseta gimnástica. El tanto del empate fue oro molido para una Segoviana inconformista que olió sangre y tuvo en las botas de Silva la remontada, pero su disparo se marchó alto ante un Zamora inmerso en dudas que se abalanzó sobre el descanso como un naufrago a tierra firme.
UN VENDAVAL SIN PREMIO
Tras el paso por vestuarios, el ciclón gimnástico no dio tregua al Zamora con una Segoviana lanzada a tumba abierta sobre la portería de Fermín y en los que hizo méritos más que suficientes para ponerse en ventaja con claras ocasiones de gol. Primero Tellechea resolviendo por encima del larguero un contraataque, después Silva con un disparo desde el corazón del área que le salió centrado a portería y, acto seguido, con un remate de cabeza de Davo que se marchó acariciando el palo. Tres llegadas que la Segoviana perdonó y cerca estuvo de pagar.
Ramsés Gil agitó el árbol haciendo debutar a Rodrigo junto a la entrada de De la Mata y Hugo Marcos, quitó a Manu y el equipo azulgrana perdió el timón del centro del campo. Los cambios no sentaron bien a la Segoviana que entró en dudas y dio alas a un Zamora que, si minutos antes comenzaba a ver con buenos ojos el empate, comenzó a ganar terreno y se apoderó en la recta final del choque. Tanto que, Clavería con un disparo duro que atajó Carmona y Speljak con un tiro que se marchó por encima de la meta segoviana llevaron el nerviosismo a una Albuera que, finalmente, vio como Segoviana y Zamora firmaron la paz en forma de empate.
Así, con este nuevo punto, la Segoviana se va hasta los nueve en la clasificación, mantiene la diferencia con el equipo de Juan Sabas y continua invicto en su feudo donde cuenta con un bagaje de una victoria y dos empates. La próxima parada para el equipo de Ramsés Gil será el próximo sábado, a partir de las 18.30 horas en Tajonar, donde los azulgrana se medirán al filial de Osasuna.
