La prolongación en el tiempo de una racha positiva como la que tiene en su haber el equipo del Unami de fútbol sala femenino (invicto en 2010) hace que, en cada partido, la sensación de confianza y las buenas vibraciones a la hora de enfrentarse al siguiente rival aumenten casi en las mismas proporciones que la amenaza de que los buenos resultados se corten de pronto. Por esto da mucho respeto que el resultado de un partido tan determinante como el que disputarán esta tarde en Collado Villalba las chicas de Javier Martín Pena, parezca abocado a los pies del destino.
Como ejemplo, por un lado, la posición de ambos conjuntos en la tabla. El Unami, en séptimo lugar, aventaja al Collado Villalba por dos puntos. Sin embargo, las madrileñas cuentan con un partido menos… aplazado ante uno de los ‘cocos’. De cualquier manera, la tabla es engañosa con cualquiera de los dos equipos. Quizás por ello, el que salga ganador del encuentro de hoy, y teniendo en cuenta que Leganés y Leis descansan, saldrá también muy reforzado en la clasificación, pudiéndose encaramar a la quinta posición; la primera de la zona burguesa de la tabla.
De ahí la innegable importancia de un enfrentamiento para el que Martín Pena podrá contar con Laura, que entrenó el jueves con sus compañeras, y con Laura Llorente, cuyo tobillo dio un susto durante la semana, pero no con María ni Rocío.
Por otro lado estará la historia. Ésta no ha sido amable con el conjunto segoviano cuando se ha enfrentado de manera oficial al Collado Villalba, pero ya se sabe que la venganza llega cuando coraje y dolor combinan en su máxima expresión. Y el valor de las azules ahora es abismal. Y el 0-6 de la ida todavía hiriente. Por eso vale la pena apostar por que la racha de las segovianas continuará una semana más.
