Desde el pasado mes de febrero se imparte en el Campus María Zambrano el curso “El teatro como recurso educativo”, el cual pretende transmitir y enseñar la técnica del teatro de la improvisación como recurso psicopedagógico a los futuros maestros y educadores, pero también a estudiantes y profesores de otras titulaciones del Campus.
El teatro como recurso educativo es el paradigma que la docente del curso, Magdalena Gil Bartolomé, viene defendiendo y aplicando desde el año 2007 de manera complementaria a su profesión de psicóloga. Cuando en el año 1997 empezó a formarse en las artes escénicas observó como la práctica teatral tenía un alto componente liberador de nudos emocionales en las personas, así como ser facilitadora del desarrollo personal y social. Esta conexión entre la psicología y el teatro es lo que impulsó a Magdalena a desarrollar su tesis doctoral referida precisamente al teatro como recurso educativo para la inclusión.
En palabras de la profesora del curso “la formación en las técnicas del teatro de la improvisación permiten avanzar en una línea de investigación dirigida a la formación del maestro en técnicas que le posibiliten tomar parte más activa en el proceso de desarrollo de los alumnos”. La tendencia actual en España está siendo fomentar la capacidad investigadora de los profesores y educadores con el objetivo de recoger las aportaciones que son factibles de evaluación. “El profesorado se convierte en investigador en su propia aula dirigiéndose más a los procesos que a los contenidos”, señala la responsable del curso. “Por este motivo, —añade— es necesaria la innovación en técnicas educativas que permitan atender de manera integral al alumno, donde el docente se involucre mucho con sus estudiantes, superando el papel de transmisor de conocimientos a otro más activo y participativo. En otros países, el teatro es un componente lúdico de elevada importancia para el aprendizaje escolar”.
Este curso forma a los alumnos desde la propia experiencia personal en la práctica del teatro de la improvisación. Desde un planteamiento de autoconocimiento se pretende que los alumnos se manejen en el uso del teatro de la improvisación como herramienta para detectar en el aula las posibles dificultades en el desarrollo de sus futuros alumnos, permitiendo a su vez, poner en práctica la resolución de conflictos y la gestión de las emociones a través del teatro. También despertar y potenciar la imaginación y la creatividad a través del teatro permitirá a los alumnos del curso adaptar la representación de cuentos a situaciones sociales actuales en el contexto del aula.
En este sentido, la programación del curso incluye temas como la escenificación de cuentos y su aportación a la integración y la atención a la diversidad del aula, la educación en valores y la resolución de conflictos a través del teatro, el conocimiento de los arquetipos simbólicos de los personajes de los cuentos, el uso del teatro de la improvisación para el diagnóstico de dificultades en niños o adolescentes, así como la elaboración de un Plan de actuación y Programación de aula teatral.
Tras la primera edición del curso el año pasado nació el grupo de teatro Zambrano, que en la actualidad continúa haciendo teatro todos los miércoles en el edificio Santiago Hidalgo. El equipo está trabajando en un proyecto sobre la prevención de la violencia desde la improvisación, enfocada en clave de humor y orientada a la prevención de las relaciones insanas y de dependencia emocional entre los jóvenes.
El grupo de teatro Zambrano sigue creciendo y está abierto a nuevos alumnos. Se puede contactar con ellos a través de psicoteatroypaz@gmail.com.
